Ximo Puig ha explicado este martes en un encuentro informativo en Madrid que el mayor objetivo de la Comunidad Valenciana es “conseguir una alta calidad asistencial”. A juicio del presidente de la región, la sanidad bajo el Gobierno del Partido Popular “estaba gestionada con despropósito”, lo que les hizo recibir un sistema “con un deterioro muy grande” cuando llegaron al Ejecutivo en 2015. El líder socialista ha insistido en que la Comunidad “tiene hospitales de gran calidad”, si bien pretenden “lograr una mayor respuesta en Atención Primaria”.

El ‘president’ de la Generalitat ha insistido en que es primordial “que nadie deje de tener acceso a la sanidad por cuestiones económicas”. Por ello, en respuesta a Redacción Médica, Puig ha recordado que su Gobierno suprimió el copago farmacéutico: “Nos dimos cuenta de que mucha gente entre ayudar a sus hijos y comprar fármacos, elegían la primera opción; eso hizo que el 27 por ciento de los que dejaron su tratamiento fallecieran”, ha matizado el titular valenciano, que ha estado respaldado en el acto por la consejera sanitaria, Carmen Montón, así como por el subsecretario del departamento, Ricardo Campos.

Puig, que estima que la conferencia de presidentes no será antes “de final de año”, ha insistido en que propondrá que las Comunidades Autónomas “tengan una financiación suficiente” en las competencias que gestionan directamente, como la sanidad. “Se hace necesaria una equidad financiera y de asistencia sanitaria, por lo que necesitamos la corresponsabilidad de todas las autonomías, lo que no puede haber son paraísos fiscales dentro de España”, ha sentenciado. Del mismo modo, ha enfatizado en la inutilidad del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) porque “borra la presencia de las regiones y no supone una solución sino un aplazamiento del problema de la deuda”.

Una región 'maltratada'

El hilo conductor del discurso de Puig se ha basado en la infrafinanciación valenciana: “De casi 2.000 millones de euros desde 2012”; así como los problemas que arrastra con la deuda. “No queremos que el resto de españoles carguen con la corrupción que hemos sufrido pero tampoco los valencianos tienen que cargar con esta situación”, ha comentado. A su criterio, son “la única comunidad pobre que contribuye como rica”. Problemas que podrían encontrar solución en una “refundación del Estado de las Autonomías a través de una reforma constitucional” que derive en “un modelo similar al federal”.

La estabilidad de su Ejecutivo también ha tenido unos minutos en su intervención. Puig ha asegurado que se siente “feliz” con el Pacto del Botánico: “Pronto firmaremos un actualización”. Del mismo modo, ha añadido que en ningún momento lo vio “peligrar” por los embates de la política nacional, pues esta no planteó ningún conflicto entre el PSOE y Compromís. “Me llevo bien con Mónica Oltra”, ha añadido en este sentido. “Si tuviera mayoría absoluta, preferiría repetir este Gobierno”, ha sentenciado.

Joan Lerma, vicepresidente segundo del Senado; y Antonio Hernando, portavoz del grupo socialista en el Congreso .A la derecha, el portavoz de la gestora socialista, Mario Jiménez

Francesc Romeu, vicesecretario y portavoz del PSOE Comunidad Valenciana; Joan Baldoví, portavoz de Compromís en la Cámara Alta; y el diputado socialista en la Asamblea de Madrid, Ángel Gabilondo.

Vicent Soler, consejero de Hacienda y Modelo Económico; Vicent Marzà, consejero de Educación, Investigación, Cultura y Deporte; y Elena Cebrián, consejera de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural.

Elena Cebrián saluda a Gabriela Bravo, consejera de Justicia, Administración Pública, Reformas Democráticas y Libertades Públicas, en presencia de Joan Lerma y Antonio Hernando.

La consejera de Sanidad Universal y Salud Pública, Carmen Montón, conversa con Catherine Cummings, directora de Sostenibilidad y Relaciones Internacionales de Sanitas.