Medicina y vocación son dos conceptos que suelen ir de la mano, pero los sanitarios siempre insisten en que este interés y amor por la profesión no lo es todo. Así, muchos de ellos reivindican el
derecho a tener vida personal y el cumplimiento de unas
condiciones laborales óptimas, aunque tengan que enfrentarse con compañeros que no opinen lo mismo que ellos.
Es el mensaje que transmite un residente de Medicina Familiar y Comunitaria a través de su perfil de Twitter. "Hay médicos que piensan que la profesión es un
convento de clausura en el que la vida personal es secundaria", comienza detallando este residente. "A muchos
no les gusta que se libren las guardias, que disfrutes de
días libres o que pidas una
reducción de jornada para cuidar a los hijos... Monjes de boquilla".
Sus palabras surgen en respuesta a una compañera quien expresaba su sorpresa ante las preguntas de un
futuro residente durante una charla, ya que en los
próximos meses decidirán qué especialidad coger. "Ayer me quedé un poco sorprendida por alguna pregunta que hacía alguna compañera tipo:
¿Es compatible la especialidad con ser madre? Y yo, ¿cómo? ¿Perdona? A ver que estamos en el siglo XXI...", expresa esta endocrina, quien lamenta que haya mujeres que se sigan planteando esas dudas.
Un embarazo no debe limitar para elegir especialidad MIR
"Desde luego que si la
carga asistencial recae demasiado sobre el residente, que por otra parte tiene que demostrar constantemente que es "bueno", para muchas la
maternidad es inasumible durante la residencia. Y durante los
primeros años de adjunto también", argumenta una sanitaria en el hilo.
En esta línea, otro facultativo detalla que posiblemente "
será más difícil llevar un embarazo según que especialidad te guste, pero eso
no debe limitarte en absoluto a la hora de elegir especialidad o de
decidir sobre tu maternidad. Solo faltaba". Sin embargo, una residente de Oncología Radioterápica reconoce que en "los servicios que se ve mal el embarazo no se ve mal solo el de las residentes. Vamos, como en el resto de trabajos del universo", aunque sí apunta que cree que "
es algo que está cambiando muchísimo y que en general en los hospitales no ponen pegas por este tema".
"Es por
falta de cultura de conciliación vida laboral y familiar. No hay que renunciar a ninguna. Todo es compatible con mejoras de las condiciones laborales", opina un endocrino.
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