La ausencia de una
limitación para el uso de las
Urgencias se está convirtiendo en un quebradero de cabeza para los médicos, quienes inciden en la importancia de la
educación sanitaria entre los pacientes para
evitar colapsar el sistema. Con el objetivo de hacer reflexionar sobre el mal uso que se da en las
Urgencias Pediátricas, un especialista ha detallado en ‘X’, antiguo
Twitter, algunas de las situaciones que ve con más frecuencia y que no son realmente urgentes.
“Estas son 12 situaciones reales que cada vez se producen con más frecuencia y que tanto padres como los pediatras saben que no son urgentes”, ha escrito el médico
David Andina en su perfil.
De entre todos los ejemplos que ha destacado, la situación "más triste" que ha vivido en las Urgencias y que ocurre cada vez "con más frecuencia" está relacionada con los
padres que están separados. Estos llevan a su hijo para una revisión completa antes de entregarlo de vuelta con
su otro progenitor, verificando, así, que está sano antes de dárselo a su expareja para no tener ningún problema.
En otras ocasiones, los padres acceden al servicio buscando un beneficio. En palabras del médico, se ha encontrado situaciones en las que el paciente tiene mocos o tos, pero sus progenitores saben que está bien y lo que quieren son dos
justificantes: uno para ellos y otro para el niño, con la intención de que este pueda quedarse unos días reposando en casa sin tener que ir al colegio.
Urgencias Pediátricas en periodo vacacional
Con la llegada de la
época estival y
el periodo de vacaciones, las Urgencias se llenan de padres que solicitan la revisión completa de sus hijos para irse “tranquilos” durante unos días a descansar, a pesar de no presentar síntomas de ninguna patología. Este especialista ha nombrado este
mal uso hospitalario como ‘El chequeo antes de las vacaciones’.
Las
mentiras y engaños también están a la orden del día en Urgencias. Según ha argumentado este médico, hay progenitores que acceden al hospital aseverando que vienen derivados de un
centro de salud y que allí, el pediatra, les ha mandado una
radiografía. Tras pedirles el volante, estos afirman que no lo han recibido, generando un ambiente de desconfianza entre el personal sanitario.
Derivaciones por personal no sanitario
Otra de las situaciones que presencia Andina con frecuencia es la llegada al servicio de un niño para una revisión recomendado por otros padres que no son sanitarios. Para contextualizar este punto, el médico ha puesto de ejemplo a una madre que llegó a este área hospitalaria indicando que le habían dicho que el
niño tenía la cabeza “plana” y que necesitaba un casco, y que lo mejor que podía hacer era ir directamente al
neurocirujano, sin pasar antes por un centro de salud.
‘El dolor de oído urgente’ se considera un clásico en las Urgencias Pediátricas. Los padres llegan con su hijo y explican que lleva con
dolor en el tímpano desde hace varios minutos. Cuando son preguntados sobre si le han dado algún medicamento para aliviar el dolor, estos declaran que no, y que han preferido ir al servicio diréctamente.
Urgencias Pediátricas para pacientes hermanos
Por último y, según ha subrayado este médico, también destaca el llamado ‘Hermanos sanos’, una situación donde los padres llevan a su hijo por algún tipo de
patología, y aprovechan el viaje para que también se le haga una revisión a su hermano.
Tras detallar todas estar situaciones que representan el mal uso que se le da a las Urgencias, este profesional ha resaltado que España es de los “pocos países” que
no tiene ninguna limitación. “El sistema está roto y en parte somos culpables los usuarios. Es necesario más educación sanitaria y promover un uso racional de este servicio”, ha concluido.
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.