La
pandemia del coronavirus ha llevado a los
médicos y enfermeros a enfrentarse a situaciones inverosímiles más allá de sus propias jornadas de trabajo: desde la
solidaridad diaria mostrada a golpe de aplauso hasta
ataques por salir a trabajar o incluso por
ser considerados un riesgo por sus propios vecinos.
Hace unas semanas, varios
supermercados anunciaron que
darían prioridad a los profesionales sanitarios cuando acudieran a realizar sus compras. Sin embargo, esta prioridad no es vista con buenos ojos por algunos ciudadanos. Es lo que ha denunciado un enfermero a través de
su perfil de Twitter.
Jaime Rueda, enfermero en una planta de Covid-19 en el Hospital de Fuenlabrada, explica que era la
primera vez que hacía uso de su acreditación y que una vez terminada la compra, un chico se acercó para espetarle: “Eres un
caradura, un
sinvergüenza y se te debería caer la cara porque yo soy policía y podría utilizar esa preferencia todos los días si quisiera”.
Ante esta acusación, el enfermero cuenta que trató de explicarle que "las colas son interminables", tenía que "seguir haciendo cosas en casa· y no quería "exponer a nadie". Sin embargo, esta persona le siguió increpando, "a lo que se suma la señora de detrás, a la que yo he adelantado con la preferencia, para decirme que
el policía tenía razón y que les tenía q haber pedido perdón".
"No sirve de nada tanto aplauso"
"Yo, con una vergüenza y unas
ganas de llorar horribles bajo al coche y cuando salgo del parking me encuentro al policía con su perro esperándome para
increparme y seguir insultándome", relata este enfermero y reitera que él había usado "la preferencia con justificación", pero aunque no fuera así, si el supermercado ha habilitado "
esta condición para la gente que estamos yendo día a día a trabajos donde nos jugamos el tipo, no pasa nada por hacerlo".
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"Vivimos situaciones que no deseamos a nadie y hacemos como sí nada, hemos elegido esta profesión, pero no hemos elegido sufrir"
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"A diario
tenemos turnos que parecen interminables, vivimos situaciones que no deseamos a nadie y hacemos como sí nada, alentando a aquellos que están solos y alentándonos entre nosotros.
Hemos elegido esta profesión, pero no hemos elegido sufrir. Llego a casa y me aíslo de mi familia", expresa Jaime.
"
No sirve de nada tanto aplauso... si luego a la hora de la verdad seguimos quedando relegados a ese segundo plano del que nunca saldremos. Quizás yo lo he hecho mal... pero después de días así lo único que quieres es sentir el ánimo de los tuyos y poco más...", continúa.
Su testimonio ha llamado la atención de decenas de usuarios, quienes
han lamentado que haya tenido que pasar por una experiencia así. "Has de usarla no una, sino todas las veces que la necesites, no solo porque
vendrás reventado de trabajar horas y horas viendo tristezas, sino que es algo lógico que personas que están poniendo sus familias en riesgo por salvar otras merezcan algo de gratitud", responde un usuario.
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