Nos hemos acostumbrado a ver explosiones de felicidad en las
redes sociales. Los
MIR de este 2023 publican
vídeos y fotos del momento de su adjudicación de plaza en los que las sonrisas, las lágrimas y los abrazos se convierten en auténticos protagonistas. Cargados de purpurina, pancartas y globos, los futuros residentes se congratulan de este instante con el que llevan soñando toda la vida. Sin embargo, al otro lado se sitúa un grupo de
médicos que no han conseguido esa plaza ansiada o que, pese a haberlo logrado, no tienen los mismos sentimientos de efusividad.
Así lo describe
Marcos Castillo. "Parece que con la
adjudicación de plaza el único sentimiento que tienes que tener es alegría, ilusión, entusiasmo y ganas. Cualquier otro sentimiento puede hacer ver que, en verdad, no lo quieres y te hace sentirte mal contigo mismo", explica en un vídeo publicado en
TikTok.
El
médico, que ha conseguido plaza para hacer la
residencia de Pediatría, expone que ha hablado con muchos amigos sobre esta cuestión. "Tras la euforia del momento empieza el bajón y es cuando te preguntas: ¿he hecho bien? ¿me irá bien? ¿es correcto irme de casa? ¿debería haberme quedado?".
En su vídeo, asegura que todo lo que rodea el proceso del
MIR se "romantiza mucho y tienes que estar 100% contento, pero hay otros sentimientos más que también son válidos y coexisten. Todos lo celebramos, pero creo que nos sentimos culpables por las dudas o el miedo. Esto no se habla y solo se ve la parte bonita".
Castillo: "El proceso MIR se romantiza mucho. Todos lo celebramos, pero nos sentimos culpables por las dudas o el miedo"
|
De esta forma, el futuro especialista manda un mensaje a todos aquellos que, pese a estar viviendo ese momento tan esperado que han buscado durante años, tienen sentimientos encontrados. "Es normal que no todo sea alegría, es normal tener la incertidumbre, incluso llorar. No tienes que sentirte culpable ni vas a hacerlo peor en la
residencia por ello. Todos tenemos vértigo con lo que viene".
Médicos que ven agotadas sus plazas MIR
En el otro lado de la balanza se sitúan aquellos que no eligen en las primeras tandas y ven cómo las plazas que deseaban se van entregando a otros médicos.
Laura Rambla se confiesa también en
TikTok explicando cómo es la adjudicación cuando no estas entre los primeros en elegir.
"Pensaba que lo peor ya había pasado. Es cruel ver cada día a gente con mejor número que tú elegir y que tus
plazas vayan mermando. Ves cómo se van y no las puedes coger al vuelo", explica en un vídeo.
Rambla: "Es cruel ver cada día a gente con mejor número que tú elegir y que tus plazas deseadas vayan mermando"
|
"Es una mierda. Dije, no lo voy a mirar porque es horrible. Pero mientras todos trabajan y hacen sus cosas, yo me como las uñas", asegura antes de afirmar que su suerte es contar con una sesión psicológica poco tiempo después de la
asignación de ese día para gestionar la decepción y la ansiedad.
"Queda un minuto para ver cómo me quitan las plazas, vamos a verlo como un juego", explica visiblemente nerviosa. "No pasa nada, me han quitado mi
hospital... no pasa nada, no voy a lllorar... Tengo otras opciones, pero mi hospital soñado me lo han quitado y no me lo esperaba tan pronto... me voy a ver a mi
psicóloga", zanja en su vídeo mientras comprueba que tampoco tiene ya posibilidades en otro de los hospitales que tenía en mente para su residencia.
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.