La palabra simulacro se incluye en el vocabulario habitual de los aspirantes
MIR cuando están a escasas semanas de presentarse a la prueba. Estos exámenes de práctica, aunque ayudan durante la preparación, también pueden ser contraproducentes y afectar a la
salud mental de los futuros especialistas. Por ello, es importante tener un ‘soporte emocional’ que esté con los médicos cuando los resultados no acompañan con las expectativas, o, simplemente, para corregirles las preguntas.
En este sentido, una futura residente ha preguntado públicamente en X, antiguo Twitter,
cuál es la persona ‘simu’ de los aspirantes. “Me refiero al que te ayuda a pasar los simulacros cada semana. El mío es mi hermano”, ha reconocido en su perfil personal.
Tras lanzar la pregunta, otros compañeros que estarán el 25 de enero frente a un examen que decidirá su futuro laboral dentro del sector de la salud también han querido dar su opinión. En el caso de Belén, médica,
su apoyo indispensable es su novia. “La de veces que le he llorado y le he dado la ‘turra’ con lo mismo. Y ahí está ella siempre para escucharme y cuidarme”, ha escrito junto al emoticono que se muestra emocionado.
De hecho, es bastante habitual que este tipo de apoyo venga principalmente de la
pareja del médico. Por parte de María, su novio es el que
está ahí cuando ella flaquea y los resultados del simulacro no han sido los esperados. “El pobre no entiende por qué las respuestas en el custionario están enumeradas en vez de estar con las letras del abecedario, aunque yo tampoco”, ha reconocido.
Apoyo emocional con los simulacros MIR
Otra aspirante
MIR, tras leer la pregunta, ha respondido advirtiendo que con su respuesta se iba a poner “ñona” y que su principal apoyo es “su futuro marido”, aunque él todavía no lo sabe. “
Me ha preparado una cita cada sábado hasta el examen”, ha afirmado este médico, quien espera conseguir una de las
9.007 plazas MIR disponibles.
La metodología que le prepara la pareja de esta médica para que consiga airearse de la preparación es clara:
el sábado por la mañana le da una pista sobre dónde irán esa noche, y ella lo tiene que adivinar. Un juego que le ayuda a desconectarse y que consigue mantener ese vínculo entre ella y su novio a pesar de las horas que tiene que invertir en sus estudios. “
No habrá palabras en el mundo para agradecérselo”, ha indicado.
Las madres de los MIR, el soporte fundamental
Pero, no todos los que acabarán siendo residentes tienen pareja. ¿Qué pasa entonces con ellos? Pues que recurren a aquella persona que, por lo general, siempre estará ahí para cuando lo necesitan:
sus madres. Esto es precisamente lo que ha respondido una de las facultativas, y la autora del hilo le ha respondido afirmando que
las “mamis son las mejores”.
Aún así, también están los aspirantes que prefieren no tener a nadie al lado que haga de soporte emocional. Es el caso de Annie, quien ha alucinado con la confianza que depositan sus compañeros sobre alguien para que les dicte bien las respuestas “sin liarse”. “Además, me
daría mucha presión que esa persona me preguntarse, tras salir del examen, qué tal me ha salido”, ha concluido.
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