Desde hace años, muchos profesionales sanitarios e incluso cargos directivos están poniendo en marcha y defendiendo
estrategias para humanizar la sanidad. Todo el mundo, antes o después, tendrá que pasar por el papel de paciente, y para ello, este tipo de iniciativas pelean para que
se haga de la manera más sensibilizada y respetuosa posible.
Sin embargo, en ocasiones son los propios profesionales quienes se encuentran con
compañeros o superiores cuya frialdad en lo personal les impacta. Es el caso de la residente de tercer año que usa
Twitter como
@silveryraindrop, que ha querido compartir con sus seguidores una reflexión en este sentido, recordando un episodio que le ocurrió cuando era estudiante.
"Hace años, cuando era estudiante,
lloré por un paciente. La adjunta me miró con una sonrisa condescendiente y comentó: -Desde luego,
tú no vales para médico", cuenta que le contestó su responsable en formación.
Años después, esa estudiante añade que "hoy, saliente de guardia y tras haber llorado por otro paciente, comprendo que la que jamás valió fue, seguramente, ella", unas palabras que acumulan casi 6.600 retuits y más de 21.500
likes en la red social.
Poca sensibilidad
La residente añade poco después que lo único que sabe es que "cuando sea adjunta, no me horrorizaré cuando un resi me pregunte dudas, ni cosas por el estilo. Le daré refuerzo positivo y potenciaré su autoestima. La
buena medicina nace de las buenas personas. No quiero que mis resis sean amargados". Lamenta, además, que en la carrera se potencie muy poco la sensibilidad, algo de lo que "no te das cuenta de su importancia hasta que no trabajas".
Esta médica recuerda que desde el primer momento descrito han pasado diez años y perdió la pista a su adjunta, pero señala que
era muy buena profesionalmente, "respetuosa con los pacientes y obtuvo una notaza en su MIR. Es solo que era demasiado fría".
Su mensaje ha provocado además numerosos comentarios aplaudiendo su postura y recordando que cada vez son más lo que buscan dar visibilidad a la sensibilidad humana en el entorno laboral, aunque crean que todo lo "humano" está muy abandonado en la sociedad. "La sensibilidad y la empatía son sinónimos de debilidad en el mundo profesional actual", explica un usuario, mientras que otro añade que "la
empatía debería ser una asignatura obligatoria dentro de las carreras con trato al público, sobre todo cuando vas a curar sus problemas o los de sus seres queridos".
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