Estoy hasta el mismísimo de la palabra vocación. Que trabajamos POR DINERO, que si no cobramos no podemos vivir! Basta ya de romantizar toda la rama sanitaria.
— Andrea (@Andre_Hdz) September 20, 2020
Pienso como tú. Y que conste que me gusta mi profesión, pero como decía una compañera a la que aprecio mucho "Yo, vocación de marquesa, pero trabajo para ganarme la vida"
— MaríaE.Rodriguez (@granocular) September 20, 2020
La vocación no nos exime de pagar facturas. De vocación no se come ni se vive. Si no se mejoran las condiciones, la vocación se llega a agotar y se acaba frustrado con el trabajo, lo que repercute en nuestros pacientes, lo queramos o no
— Hitchkicker (@N1Pathfinder) September 20, 2020
— Enfermera Anónima (@EnfermeraAnnim1) September 21, 2020
Por supuestísimo, pero trabajamos con "material sensible" y esto si marca una actividad laboral muchas veces impredecible, lo q no quiere decir q no sea reconocido.
— Mercedes Biosca (@MercedesBiosca) September 21, 2020