Las primeras semanas de una
enfermera recién graduada pueden ser complicadas. El desconocimiento sobre la ubicación de los
medicamentos o la
inseguridad al tratar con los pacientes son algunas de las situaciones más comunes que experimentan. Para evitarlo, dos
enfermeras veteranas han incidido en la importancia de “hacer piña” entre todas las trabajadoras de la unidad para ayudarse mutuamente, y han dado una serie de
consejos para afianzar estas relaciones.
La
primera de las recomendaciones que ha resaltado
Roció, una enfermera sevillana, es la de organizar una fiesta en su casa e invitar a todas sus compañeras. “En ocasiones, es buena idea que las enfermeras recién llegadas inviten a las veteranas a cenar. Normalmente ponen adornos y las demás traen comida que han preparado previamente”, ha explicado.
En este tipo de fiestas es habitual que se organicen
juegos para crear vínculos entre ellas e, incluso, hay veces que se hacen
novatadas. Unas dinámicas que son útiles para
compartir experiencias personales entre ellas y
fortalecer la confianza.
Llevar pasteles o saladitos al servicio
Llevar comida durante los primeros días a la unidad también es una forma eficaz de entablar relación con las nuevas compañeras. Según ha explicado Teresa, una enfermera madrileña, llevar
pasteles o montaditos es un "éxito" a la hora de conocer a las enfermeras que llevan un tiempo en el servicio. “Además, te lo van a agradecer mucho”, ha afirmado.
Pese a ello, Teresa ha resaltado que no solo hay que entablar relación con las enfermeras veteranas, sino que es “imprescindible hacerse amiga” de los Técnicos en Cuidados Auxiliares de Enfermería (
TCAE) porque facilitan “enormemente” el trabajo.
“Tú empiezas y no sabes por dónde te viene el viento. Entonces, siempre puedes pedir ayuda al resto de enfermeras, pero muchas veces estarán tan ocupadas que no lo podrán hacer. Para esos momentos, es muy importante llevarse bien con los TCAEs porque te pueden guiar y explicar donde están las herramientas que necesitas o la forma en la que se trabaja en la unidad en la que estés”, ha afirmado.
Mantener una "buena relación" con el personal sanitario
Aún así, Teresa ha subrayado que la importancia de trabajar en equipo y tener una “buena relación” con todo el
personal sanitario es “clave” para poder desenvolverse de forma eficaz en el nuevo puesto de trabajo.
“Todo el mundo está dispuesto a ayudarte. No puedes pensar que vas a ser independiente desde el primer momento. Es imposible. Siempre hay que estar atento y sabiendo que te van a ayudar. Esto no es una competición”, ha incidido.
De hecho, hacer “buenas migas” con las compañeras es un hecho “determinante” si el
supervisor de la unidad es una persona “difícil de llevar”. No suele ser la tónica habitual, pero si tenemos a un responsable que no es agradable y es difícil mantener una comunicación, podemos preguntar consejos a nuestras compañeras para encontrar la mejor manera de relacionarnos con él”, ha concluido.
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