A falta de menos de una semana para el
examen MIR 2020, los aspirantes a una plaza de
Formación Sanitaria Especializada se encuentran ya dando la última vuelta al temario. Los nervios, las inseguridades y las dudas por
cómo será la prueba MIR de esta convocatoria están a 'flor de piel'. Es por ello que muchos futuros médicos utilizan las redes sociales como desahogo para mostrar su desmotivación y frustración sobre lo que puede pasar este sábado
25 de enero.
“Este
simulacro he vuelto a bajar. Lo peor es que mientras hacia el simulacro creía que me estaba saliendo bien. Queda solo uno más y ya he perdido la esperanza de conseguirlo este año”, ha lamentado una aspirante a la prueba a través de su
perfil de Twitter.
El descontento que ha manifestado la autora del tuit
@Mirviviendo, que así es como se llama la cuenta, no se trata de un hecho aislado tras el simulacro realizado. Según ha confesado en otro comentario de su hilo, ya desde tercero de
carrera de Medicina sufre depresión y ansiedad. “De hecho, en cuarto estuve ingresada durante el curso y aun así lo saqué, con mucho esfuerzo, pero ¿para qué? Seis años de carrera que casi acaban conmigo y apenas me sirven para trabajar a largo plazo”, ha reflexionado.
El caso de esta aspirante no es puntual ya que es muy habitual que, tanto durante la
preparación del MIR como en los
años de residencia, los médicos tengan
ansiedad a consecuencia
del
estrés al que están sometidos.
“Es mi peor pesadilla”
El elevado grado de esfuerzo que supone llegar hasta el examen hace que muchos aspirantes a una plaza se replanteen ‘tirar la toalla’. “Desde los nueve años quise
ser médico, y ahora serlo casi es mi peor pesadilla. Siempre elegí el camino difícil y creo que ya es hora de parar”, ha dicho en otro de sus tuits.
“Creo que si no me da para lo que quiero me conformaré con
lo que me dé (refiriéndose a la especialidad) y así poder trabajar de algo y mientras estudiaré online
Psicología (mi otra vocación). Estoy cansada de luchar”, ha concluido.
Este pensamiento lo tienen muchos otros aspirantes a alguna de las pruebas de formación sanitaria especializada y, al final, es el apoyo entre unos y otros lo que a veces puede ayudar a seguir adelante. “No te rindas, hemos llegado muy lejos. Yo también estoy
sacrificando salud mental por esto. Con pocas expectativas, pero no es hora de rendirse. Si no es este año será el que viene. ¡Ánimo, si estás aquí es porque puedes!”, le ha escrito otra médica.
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