Un
policía de la brigada canina del Condado de Marion, en Florida, se ha convertido en un héroe en los últimos días tras conocerse su hazaña para
salvar la vida a un bebé gracias a su rápida actuación. Se trata de
Jeremie Nix, que se dirigía a su casa tras terminar su jornada cuando observó un incidente extraño desde el interior de su vehículo.
Nix vio cómo el pasado miércoles, a media tarde, un coche blanco giraba en una de las calles y se parada repentinamente poco antes de que una mujer saliera con un
bebé en los brazos y actitud angustiada, llorando y con el teléfono pegado a la oreja, sujeto por el hombro. El agente paró su coche y se dirigió a la mujer, quien le aseguraba que el menor, de solo tres meses,
no respondía y que estaba inconsciente.
En ese momento Nix intentó reanimar al bebé mediante una RCP, pero seguía sin responder. Sin pensárselo dos veces, cogió al niño y lo llevó
en su coche patrulla hasta el centro médico más cercano, sujetando al niño mientras conducía con la otra mano. "No voy a esperar a la atención médica. Me dirijo al ORMC -Ocala Regional Medical Center- que está a media milla. Me dirijo a la sala de emergencias con el bebé", se escucha que le comunica a la operadora en la grabación de la cámara de su vehículo, que
registró toda la escena.
Agradecimiento de por vida
La rápida
actuación del agente ha sido clave para el estado del bebé, llamado
Kingston, que según los médicos que le atendieron, no seguiría vivo. "¡Estamos tremendamente orgullosos del agente Nix! El niño y él tendrán siempre una conexión que durará toda la vida", han señalado desde el Departamento de Policía al que pertenece Nix.
Los protagonistas de la historia han compartido imágenes del agente con Kingston dentro del hospital, y la madre utilizó su perfil de
Facebook para agradecer lo sucedido. "Dejadme decir que ayer Dios me enseñó cuán real es. Mi hijo apenas respiraba y luchaba por su vida. Con su rápido pensamiento él y Dios salvaron a mi hijo. Más tarde él y su bella mujer vinieron simplemente a verlo de nuevo. Sus palabras hacia mi fueron 'no te peocupes, no me iré hasta que ayude a salvar a tu hijo'", relataba la madre.
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