Tras el ‘chute’ de felicidad de las enfermeras que han conseguido este año
aprobar el EIR con una nota que les permite formarse en su especialidad deseada, también comienzan a llegar
las decepciones tras el
primer mes de residencia. Y es que Laura,
R1 de Salud Mental, acaba de recibir su primera nómina de
741, 51 euros y se ha venido abajo, considerando que ese
sueldo es “precario” para el esfuerzo que estas profesionales realizan en su día a día.
“Luego que si no nos queremos especializar. Sueldo precario, tiempo de residencia que no cuenta como tiempo trabajado en las bolsas, dos años de esfuerzo por un
mínimo reconocimiento…todo son ventajas”, ha indicado de forma sarcástica en un mensaje en X, antiguo Twitter.
A pesar de que esta enfermera es consciente de los
aspectos positivos que el
EIR brinda en la formación o en la
estabilidad laboral durante dos años, también resalta que las enfermeras que no tengan la posibilidad de vivir con ese sueldo
están en desventaja frente a las que sí que pueden permitírselo. “Yo sigo pensando que
merecerá la pena, pero a qué coste”, ha indicado.
También ha indicado, para evitar que haya confusiones, que el salario percibido
no es del mes completo, sino desde el 7 de mayo que fue cuando empezó su formación. En este sentido, indica que el bruto que recibió fue 956 euros sin guardias con un
IRPF al 14 por ciento. "Con guardias lo máximo que puedo cobrar son
1200-1300 euros. Y, con todo eso, sigue sin ser un salario digno.
Es una lástima sinceramente.
Visibilizar los aspectos negativos del EIR
Tras la publicación de su nómina, otros compañeros de profesión han querido dar su opinión sobre el tema planteado.
María Fernández, R1 en
Obstetricia-Ginecología, ha reconocido que está de acuerdo con las quejas de Laura, y que, por eso, es importante visibilizar lo que es el EIR y “apostar” por ello siendo consciente de la parte que no es “tan bonita”. “Muchas veces
solo se vende el aprobar el examen y tener tu plaza”, ha indicado.
A este comentario le ha respondido la propia autora del hilo, quien ha compartido su opinión. De hecho, ha añadido que habría que visibilizarlo, especialmente, en gente que quizás
no tiene un sustento económico que le permita una formación durante dos años “de sueldos precarios”. “Al final, muchas veces lo primero que tira para atrás son las especialidades, luego el salario y después la preparación”, ha incidido.
Hacer el EIR, un "sacrificio" en el aspecto económico
También, una recién graduada en Enfermería ha indicado que ella va a
cobrar “más del doble” en su primer trabajo como profesional hasta febrero en el hospital de sus sueños, pero, que, aun así, se está preparando el EIR. “
¿Soy tonta o me gusta serlo?”, ha preguntado. A lo que Laura le ha respondido: “bueno, yo
estuve cobrando más del triple y aquí estamos. Supongo que todo en la vida no se puede tener y
hay que sacrificar algo”.
Para concluir, otro profesional de este sector le ha querido
mandar ánimos para que aguante la formación, porque, según afirma, merece la pena. “Ojalá lo puedas sostener en el tiempo, no te arrepentirás. Pero sí,
el camino es precario”, ha trasladado.
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