"Los pediatras somos cursis. Eso va de serie, viene con el título"

Numerosos estudios han concluido sobre la importancia del trato que el médico dispensa al paciente en consulta. Ha sido precisamente a raíz de la experiencia de una madre publicada en The BMJ, que concluye que no llamen "mamá" a las madres de los pacientes, cuando se ha generado un debate en las redes sociales entre los profesionales implicados, sobre si es beneficioso o contraproducente usar este término. 

"Yo no lo hago ni me gusta. Pero reconozco que soy un pediatra atípico"

En la publicación, una madre explica su compleja situación como madre de una pequeña con enfermedad rara que obliga a largas estancias en el hospital, y cómo el hecho de que el equipo médico se refiriese a ella como "mamá" creó una relación basada en el poder "que no reconocía mi papel como individuo" en la vida de su hija. A ella le frustró que los profesionales de la salud pasaran por alto preguntarle cómo le gustaría que la abordaran. Por ello asegura que puede que llamarles "mamá y papá" no sea un problema pero que no lo den por hecho y lo pregunten, ya que aunque parezca algo sencillo, puede ayudarles a sentirse apreciados por el conocimiento y experiencia que aportan. 

Al hilo del artículo, la médica Mónica Lalanda recogía la frase que ella suscribía por utilizar un término "inapropiado", y añadía que también "cursi". "Si eres un profesional sanitario que atiendes a mis hijos, por lo que más quieras, no me llames 'mamá'", escribía en su perfil en Twitter citando el texto. 

Sin embargo, otra pediatra admitía que en el colectivo "somos cursis. Eso va de serie, con el título. Yo a las madres las llamo mamá, excepto cuando me acuerdo de su nombre. No sabía que eso también ofendía...", explica para más tarde añadir que "no entiendo por qué tanta manía y tanta crítica a todo lo que hagan los/las pediatras".  

Una enfermera se ha sumado al debate admitiendo que "yo también lo hago. En la frase a lo mejor falta el nombre de nuestro paciente, sería como 'mami de Juan, papi de Ana'... pero yo creo que se sobreentiende. Si no es así, al menos no es mi intención molestar a nadie". "Pues a mí me parece muy cariñoso y muy cercano que me llamen mamá", escribe una madre, algo que la pediatra inicial agradece por el hecho de que se entienda así y no de otra manera. 

No entienden que algo así ofenda

Varios usuarios de la red social han comentado su sorpresa al ver que algo así podía ofender. "Algunos tienen la piel muy fina... Si el médico/enfermera/auxiliar tuviera 30 min para estar con ella se aprendería nombre y demás... pero que me llamen papá no me molesta (ni cuando mi hija estaba en la UCI, ni ahora)", dice un padre. "A mí, la pediatra de mis hijos me llama papá. No solo no me ofende, sino que me gusta. Es más, a mis hijos les tranquiliza que se dirija a mí como tal ya que ellos no me llaman por mi nombre sino por papá y ven la situación un poco más, no sé cómo decirlo, cercana... conocida", explica otro padre. "No sabía que molestaba. A mí no me molesta, no tiene por qué saberse mi nombre, es el médico de mi hija, no el mío. Me parece un trato más cercano y cariñoso hacia la peque, 'hablando su idioma'", se suma un tercero. 

Sin embargo, no todas las posturas son a favor de este trato, ya que también hay quien admite que no le gusta. "A mí no me gusta personalmente que me digan mamá, se me hace un poco creepy que un adulto me diga mamá, pero no me parece inapropiado. Si estoy en la consulta en calidad de madre y no sabe/recuerda mi nombre de alguna forma me tendrá que llamar", escribe una maestra. "A mí me ofende, la verdad. Me preocupa que traten con afecto a mi hijo y le diagnostiquen bien y poco más", añade una periodista. 

Por último, otro pediatra señala que "yo no lo hago ni me gusta. Pero reconozco que soy un pediatra atípico: ni hablo en diminutivo ni llevo el bolsillo de la bata lleno de muñequitos", confiesa, demostrando que no todos opinan lo mismo en este sentido.