MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
Una investigación de la Universidad de Bradford (Reino Unido) ha demostrado que el cerebro compensa los cambios en el ojo causados por el glaucoma, cuando mira objetos con niveles de contraste habituales. Los hallazgos contribuyen a comprender por qué los pacientes de glaucoma reportan pocos síntomas tempranos de la enfermedad.
El glaucoma es una enfermedad ocular común donde el nervio óptico que conecta el ojo con el cerebro se daña. Se desarrolla lentamente durante muchos años y afecta primero a la visión periférica. Si no se trata, provoca una pérdida permanente de la visión.
Dificulta la visión de contraste, es decir, las diferencias entre los tonos de luz y los de oscuridad, por lo que los ojos son menos capaces de detectar objetos de bajo contraste. Pero hasta ahora no ha quedado claro si esta pérdida de sensibilidad al contraste significa que los pacientes con glaucoma ven los objetos visibles de manera diferente a las personas sanas.
Ahora, estos investigadores han evidenciado que las personas con glaucoma ven el contraste detectable de la misma manera que los pacientes sanos, a pesar de su pérdida de visión medible. En el estudio, publicado en la revista 'Investigative Ophthalmology & Visual Science', se confirmó la enfermedad de 20 participantes con glaucoma de etapa temprana a moderada y se trazaron mapas de las áreas de pérdida de visión periférica.
Luego se les pidió que respondieran a una pantalla de parches con patrones. Ajustaron los controles hasta que una imagen en sus áreas de visión pobre se viera tan brillante u oscura como un patrón central. Se utilizó un rastreador ocular para asegurarse de que cada paciente miraba en el lugar correcto antes de que se pudiera ver el parche central. Un grupo de control de participantes sanos fue probado de la misma manera.
Los investigadores encontraron que los participantes con glaucoma no veían la imagen como más pálida, o "grisácea" de ninguna manera, sino que la veían exactamente de la misma manera que las personas con una visión saludable. Los resultados sugieren que los cerebros de los pacientes de glaucoma están compensando el daño al nervio óptico.
"Esto subraya por qué es tan importante hacerse un examen ocular rutinario para poder detectar el glaucoma antes de que se establezca el daño. Se relaciona con el hecho de que las personas que tienen glaucoma inicialmente no reportan ningún síntoma: sus cerebros están superando con éxito la pérdida de la visión de contraste", reflexiona uno de los autores del trabajo, Jonathan Denniss.