MADRID, 23 (EUROPA PRESS)
Un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Bristol (Reino Unido), y publicado en la revista 'Nature Microbiology', ha puesto de manifiesto que ciertos genes humanos se relacionan con las bacterias intestinales.
Y es que, tal y como han comprobado, los cambios específicos en el ADN, las cadenas de moléculas que comprenden nuestra composición genética, afectan tanto a la existencia como a la cantidad de bacterias particulares en el intestino.
"Nuestros hallazgos representan un avance significativo en la comprensión de cómo la variación genética afecta a las bacterias intestinales. Además, marca un gran avance en nuestra capacidad para saber si los cambios en nuestras bacterias intestinales realmente causar o son consecuencia de una enfermedad humana", han dicho los expertos.
El cuerpo humano comprende varios ecosistemas únicos, cada uno de los cuales está poblado por una amplia y diversa gama de microorganismos. Incluyen millones de bacterias en el intestino, conocidas como el microbioma, que ayudan a digerir los alimentos y producen moléculas esenciales para la vida.
Esto ha llevado a los investigadores a preguntarse si las bacterias intestinales también pueden influir directamente en la salud y las enfermedades humanas. De hecho, investigaciones anteriores han identificado numerosos cambios genéticos aparentemente relacionados con la composición bacteriana en el intestino, pero solo una de esas asociaciones se ha observado de manera consistente.
Este estudio, el más grande de su tipo, identificó 13 cambios en el ADN relacionados con cambios en la presencia o cantidad de bacterias intestinales. "Fue emocionante identificar señales nuevas y robustas en las tres poblaciones de estudio, lo que hace que la correlación de la variación genética y las bacterias intestinales sea mucho más sorprendente y convincente. Ahora viene el gran desafío de confirmar nuestras observaciones con otros estudios y diseccionar cómo estos cambios en el ADN podrían afectar a la composición bacteriana", han zanjado los expertos.