MADRID, 30 (EUROPA PRESS)
Combatir una pandemia puede llegar a ser hasta 500 veces más caro que prevenirla, según han evidenciado un equipo de investigadores de la Universidad de Boston (Estados Unidos) en un estudio publicado en la revista 'Science'.
Durante décadas, los científicos y activistas ambientales han estado tratando de llamar la atención del mundo sobre los muchos daños causados por la rápida destrucción de los bosques tropicales. Uno de estos daños es la aparición de nuevas enfermedades que se transmiten entre los animales salvajes y los humanos, ya sea por contacto directo o por contacto con ganado que luego los humanos comen.
De hecho, el nuevo coronavirus, que hasta ahora ha infectado a más de 15 millones de personas en todo el mundo, parece haberse transmitido de murciélagos a humanos en China. "Gran parte de esto se remonta a nuestra indiferencia sobre lo que ha estado ocurriendo en los bosques tropicales", han avisado.
En este sentido, los expertos han descubierto que reducir significativamente la transmisión de nuevas enfermedades de los bosques tropicales costaría, a nivel mundial, entre unos 18.000 y unos 26.000 millones de euros cada año (22,2 y 30,7 mil millones de dólares).
Sin embargo, han señalado la pandemia de Covid-19 probablemente terminará costando entre unos seis y unos 13 billones de euros (8,1 y 15,8 billones de dólares) a nivel mundial, aproximadamente 500 veces más costosa que lo que costaría invertir en las medidas preventivas propuestas.
Para reducir la transmisión de enfermedades, los investigadores proponen ampliar los programas de monitoreo del comercio de vida silvestre, invirtiendo en esfuerzos para terminar con el comercio de carne silvestre en China, invirtiendo en políticas para reducir la deforestación en un 40 por ciento y luchando contra la transmisión de enfermedades de animales salvajes al ganado.
Solo en China, la agricultura de vida silvestre (un esfuerzo supervisado por el gobierno para cazar de manera sostenible a los animales salvajes sin cazarlos) es una industria que emplea a 15 millones de personas. En muchas comunidades de China, la compra de animales silvestres es un símbolo de estatus.
Los investigadores también proponen aumentar los fondos para crear una biblioteca de código abierto de las firmas genéticas únicas de virus conocidos, lo que podría ayudar a identificar rápidamente la fuente de enfermedades emergentes y detectarlas más rápidamente, antes de que puedan propagarse.
"La pandemia ofrece un incentivo para hacer algo que aborde las preocupaciones que son inmediatas y amenazantes para las personas, y eso es lo que mueve a las personas. Nada parece más prudente que darnos tiempo para enfrentar esta pandemia antes de que llegue la próxima", han zanjado.