MADRID, 16 (Reuters/EP)
El número de casos confirmados de sarampión en Estados Unidos ha aumentado en casi un 20 por ciento hasta el 11 de abril, en comparación con el mismo periodo del año pasado, lo que supone el segundo peor brote de esta enfermedad en suelo estadounidense en casi dos décadas, según datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EEUU (CDC, por sus siglas en inglés).
Así, se han registrado 555 casos de sarampión en 20 Estados desde principios de año, frente a los 465 en los primeros cuatro meses de 2018. El informe del CDC no especifica si ha habido alguna muerte. En cualquier caso, la situación en Estados Unidos no es excepcional, pues la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió este lunes de que los diagnósticos a nivel mundial se han cuadruplicado en el primer trimestre de 2019: desde 28.000 a los 112.163 de este año.
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, declaró el pasado martes la emergencia de salud pública en algunas partes del barrio de Williamsburg, del distrito de Brooklyn, por un brote de sarampión en la comunidad judía ortodoxa, reacia a las vacunas. Los no vacunados en estas zonas deberán recibir la triple vírica (sarampión, paperas y rubeola) o se enfrentarán a multas de 1.000 dólares (887 euros).
Sin embargo, cinco padres presentaron el lunes una demanda ante el tribunal del Estado de Nueva York contra esta medida, alegando que va en contra de sus creencias religiosas. "No hay pruebas suficientes de una epidemia de sarampión o de un brote peligroso para justificar las medidas extraordinarias", explica el texto de la demanda, recogido por Reuters.
La ciudad de Nueva York ha confirmado 329 casos de sarampión desde octubre, incluyendo 44 desde la orden de emergencia de la semana pasada, según las autoridades sanitarias locales, la gran mayoría entre los niños de las comunidades judías ortodoxas de Brooklyn. Seis de los 44 casos adicionales se diagnosticaron recientemente, mientras que los otros 38 se descubrieron recientemente.
Otro brote ha afectado a familias judías ortodoxas en el condado Rockland de Nueva York. Las autoridades prohibieron el mes pasado el acceso a los espacios públicos el mes pasado a los niños que no habían sido vacunados. Un juez estatal revocó la orden, pero Rockland ha apelado esa decisión.