Europa Press
05 jun 2023. 19.00H
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MADRID, 5 (EUROPA PRESS)

Investigadores de Universidad de San Francisco (California, Estados Unidos) han probado los beneficios de usar continuamente un parche de nitroglicerina, un tratamiento establecido para el dolor de pecho por enfermedad de las arterias coronarias, para mujeres menopáusicas que experimentan al menos siete sofocos al día.

A diferencia de la mayoría de los tratamientos para los sofocos que se enfocan en los mecanismos cerebrales, la nitroglicerina actúa en los vasos sanguíneos de todo el cuerpo.

El artículo publicado en 'Jama Internal Medicine', los resultados de la investigación fueron mixtos. Si bien las mujeres experimentaron mejoras a corto plazo en los sofocos de moderados a severos, los beneficios de la nitroglicerina en comparación con el placebo no se extendieron más allá de las 12 semanas. Algunas mujeres también experimentaron efectos secundarios, como dolores de cabeza.

"La nitroglicerina se ha usado durante décadas para tratar el dolor de pecho en pacientes con enfermedad coronaria porque puede aumentar el flujo de sangre al corazón cuando se usa solo durante 12 horas seguidas", afirma la autora principal, Alison J. Huang, doctora de medicina interna en UCSF Salud y epidemióloga clínica.

No obstante, la autora señala que "los estudios de laboratorio sugirieron que si la nitroglicerina se usa de forma continua, podría prevenir o suprimir el tipo de flujo sanguíneo rápido y aumentado debajo de la piel que causa sensaciones de calor y sofocos durante la menopausia".

"En esta línea de investigación, reutilizamos un medicamento que se ha utilizado durante casi un siglo para una indicación diferente", destaca.

Médicamente conocidos como 'síntomas vasomotores', el rubor intenso y la sudoración se encuentran entre las características más comunes de la menopausia, ocurren en más de dos tercios de las mujeres menopáusicas en Estados Unidos y causan molestias y trastornos que pueden durar años.

La terapia hormonal puede ser muy eficaz para reducir o suprimir estos síntomas, pero existen riesgos potenciales para el uso de estrógenos a largo plazo, incluido el riesgo de algunos tipos de cáncer, enfermedades cardiacas, accidentes cerebrovasculares o demencia.

Como resultado, muchas mujeres han pedido tratamientos no hormonales que puedan presentar menos riesgos para la salud a largo plazo. Sin embargo, hasta ahora, se ha encontrado que pocos medicamentos no hormonales son efectivos.

Casi todos los enfoques de tratamiento no hormonal anteriores se han centrado en los mecanismos cerebrales que se pensaba que desencadenaban los sofocos. Pero los investigadores de la UCSF decidieron centrarse en lo que sucede en los vasos sanguíneos de las mujeres durante un sofoco.

Inscribieron a 141 mujeres de entre 40 y 62 años que se encontraban en la transición a la menopausia tardía o posmenopáusica, y las asignaron al azar para usar un parche de nitroglicerina o de placebo durante 24 horas al día. Las mujeres registraron sus sofocos a las cinco y a las 12 semanas. El diseño aleatorizado, controlado con placebo y doble ciego es el estándar de oro para probar una intervención clínica.

"La conclusión es que nuestro estudio no nos permite recomendar los parches cutáneos de nitroglicerina como una estrategia para que los consumidores supriman los sofocos a largo plazo", afirma la autora. "Pero nuestro estudio sugiere que puede ser prometedor en este enfoque general para tratar una afección común en mujeres de mediana edad. El campo de la menopausia todavía carece de enfoques de tratamiento efectivos que no involucren hormonas", añade.

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