MADRID, 18 (EUROPA PRESS)
La jefa de Servicio de Ginecología y Obstetricia del complejo hospitalario Ruber Juan Bravo, Arancha Moreno Elola, ha recordado que la prevención del cáncer de mama es posible, manteniendo hábitos de vida saludable, evitando el tabaco y la ingesta excesiva de grasas, realizando ejercicio de forma regular y acudiendo a las revisiones ginecológicas.
Ahora bien, la doctora ha subrayado la importancia de acudir a un especialista ante la aparición de síntomas de alarma: nódulos en la mama, enrojecimiento e inflamación, bultos en la axila, sangrado por el pezón, cambios en el color o en la textura del complejo areola pezón.
"La mamografía es la única prueba que ha demostrado conseguir un diagnóstico precoz poblacional y las ventajas que ofrecen superan con mucho los efectos secundarios. Además, las mamografías se pueden asociar a ecografía y resonancia magnética nuclear con contraste, muy útil en pacientes con mutaciones genéticas y especialmente en las que ya han sido diagnosticadas de cáncer de mama, para tomar decisiones en cuanto al tratamiento", ha dicho la experta.
En este sentido, la doctora ha informado de que la mayor parte de las pacientes que tratan se pueden someter a cirugía conservadora y biopsia del ganglio centinela, si bien en el caso de necesitar una mastectomía, se puede realizar reconstrucción inmediata mamaria.
"Se ha avanzado mucho en tratamientos menos invasivos, también desde el punto de vista médico, proponiéndose tratamiento individualizado a cada paciente en particular: hormonoterapia, inmunoterapia, y si es necesario, quimioterapia. Se trata de detectar las dianas terapéuticas del tumor para planificar un tratamiento específico para cada paciente. Además contamos con plataformas genómicas que nos dan un 'score' de riesgo para la toma de decisiones, siempre en el seno de una Unidad de Mama", ha zanjado.