La clave está en una proteína que segrega el tumor que crea un microambiente propicio para la proliferación
SEVILLA, 14 (EUROPA PRESS)
Un equipo de investigadores del Instituto de Biomedicina de Sevilla -IBiS-, ubicado en el Hospital Universitario Virgen del Rocío, ha descubierto un nuevo circuito que conduce a un incremento del crecimiento y malignidad de los tumores. El trabajo, que combina estudios con líneas celulares tumorales, modelos animales y bases de datos de pacientes tratados en el hospital sevillano, ha sido publicado recientemente en la revista científica 'Oncogene' del Nature Publishing Group.
Los resultados son de gran importancia para conocer la biología de los tumores y que determinan su evolución. Además, la proteína PLD2 en la que se ha centrado los estudios puede servir como diana terapéutica para el tratamiento del cáncer de colon y, potencialmente, de otros tipos de tumores.
De este modo, han descrito el microambiente en el que se haya el tumor, y en el que una proteína secretada por las células tumorales en cáncer de colon provoca alteraciones. El microambiente tumoral está formado por células tanto tumorales como no tumorales, entre las cuales existen muchas interacciones que contribuyen al desarrollo del tumor. Para ello, han utilizado muestras de tumores de pacientes tratados en el Hospital Universitario Virgen del Rocío, que han obtenido a través del Biobanco del Sistema Sanitario Público Andaluz.
En concreto, el trabajo de investigación concluye que la proteína fosfolipasa D2 (PLD2), la cual se expresa a niveles anormalmente altos en pacientes de cáncer de colon, es secretada por las células tumorales y altera a las células no tumorales del microambiente provocando en ellas una situación que los especialistas denominan 'senescencia'.
La senescencia consiste en una parada de la división celular de las células que la sufren, aunque pese a esto son capaces de secretar una serie de factores que aumentan la capacidad tumorigénica de las células tumorales. Esto hace que se establezca un circuito entre células tumorales y no tumorales que conduce a un aumento del número de células madre tumorales, que poseen una capacidad proliferativa mayor que las células tumorales normales al ser similar al de cualquier otra célula madre pluripotencial.
El trabajo ha sido realizado por la doctora Sandra Muñoz Galván, como investigadora principal, y liderado por el doctor Amancio Carnero, investigador científico del CSIC.
EL CÁNCER COLORRECTAL
El cáncer colorrectal es el tumor más frecuente en la población y la segunda causa de muerte por cáncer en hombres y mujeres. No suele presentar síntomas en su fase temprana a pesar de que se puede curar en el 90 por ciento de los casos si se detecta precozmente, lo que se logra con una sencilla prueba de heces, indicada a toda la población entre 50 y 69 años según el Programa de Detección Precoz del Cáncer de Colon y Recto de la Consejería de Salud.
Los especialistas de Aparato Digestivo, dirigidos por Juan Manuel Bozada, atienden en consulta de alta resolución a los pacientes con sospecha de cáncer de colon, a quienes se les practica una colonoscopia o biopsia de manera preferente mediante el proceso de Cáncer Colorrectal, en colaboración con los profesionales de la Unidad de Radiodiagnóstico que dirige Francisco Javier Castell o de Anatomía Patológica, coordinada por Enrique de Álava.
Los casos más complejos se resuelven finalmente en quirófano y son derivados a la Unidad de Cirugía General del Hospital Universitario Virgen del Rocío, lidera Javier Padillo, quienes operan cada año a cerca de 200 pacientes por tumores de colon y unos 80 de recto. Para ello, utilizan técnicas mínimamente invasivas, cirugía robótica y otras más complejas, según el grado de patología que presenta el paciente.