Cree que Salud dio un "mensaje equívoco" al decir que no hubo muertos
BARCELONA, 4 (EUROPA PRESS)
El alcalde de Igualada (Barcelona), Marc Castells, ha asegurado que el Govern dio "una información inexacta" este viernes al indicar que en las últimas 24 horas no había muerto ninguna persona con coronavirus en Igualada, ya que fallecieron 11.
En rueda de prensa telemática este sábado, ha dicho que ya ha informado a la consellera Alba Vergés y ha opinado que quien debe dar las explicaciones es la Conselleria, no el Ayuntamiento: "Nosotros no damos los datos; nosotros tenemos la información".
Castells ha afirmado que, de estas 11 muertes, cuatro se produjeron en el Hospital de Igualada y siete en dispositivos sanitarios y en sus propias casas, y "según los expertos, estas defunciones responden en gran parte a personas infectadas antes del confinamiento".
"Lo que nos preocupa es que ayer se pudiera dar un mensaje equívoco a la población", y ha lamentado que esta información pueda hacer que la gente se relaje y deje de seguir el confinamiento, por lo que ha pedido que se siguen extremando las medidas de aislamiento y de higiene.
"Estamos convencidos, porque parece ser que los datos de las entradas en nuestro hospital están bajando, de que parece ser que el confinamiento está dando resultados. Es la medida más segura para salir de esta situación", aunque ha constatado que el número de muertes aún no está disminuyendo.
RESIDENCIAS DE ANCIANOS
En cuanto a los centros geriátricos, Castells ha pedido que se prepare un plan de contingencia para estos centros: "Las residencias de todo el país lo están pasando mal, y reclamamos una mirada hacia las residencias".
Ha mantenido una conversación con el conseller de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias de la Generalitat, Chakir el Homrani, y espera que pronto puedan dar "buenas noticias" sobre esto.
También ha reclamado al Gobierno que dé una solución a la situación laboral que padecen los trabajadores de Conca d'Òdena que no pueden ir a trabajar por el confinamiento, y ha vuelto a exigir test rápidos para los habitantes de la zona.
POR LOS DISCAPACITADOS
En la rueda de prensa también ha participado el gerente de la entidad social de atención a las personas con discapacidad intelectual Apinas, Jordi Aymamí, que ha recordado que son un servicio esencial y que están "cada día al pie del cañón", actuando con responsabilidad hacia sus usuarios y sus profesionales.
Debido al confinamiento, han tenido que adaptarse y están usando nuevos sistemas para comunicarse con las personas: "Lo que intentamos es acercarnos a estas familias e intentar dar todo el apoyo y la atención que los sistemas de telecomunicaciones nos permiten. Estamos haciendo un gran esfuerzo".
También ha recordado que el estado de alarma establece la posibilidad de que la gente con discapacidad pueda salir a la calle acompañada de un adulto, y ha lamentado que se hayan constatado casos de recriminaciones por parte de vecinos hacia estas personas.