Redacción. Zaragoza
Las fracturas óseas tendrán tratamientos personalizados a partir del estudio de una radiografía, con la que se podrá determinar cómo se va a curar el hueso y qué va a necesitar el paciente. Estas son las primeras conclusiones del proyecto europeo CAD-BONE, liderado por un equipo del Instituto de Investigación en Ingeniería de Aragón (I3A) de la Universidad de Zaragoza (UZ).
Los principales resultados de este programa, a seis meses de su conclusión, son el desarrollo de tratamientos específicos a medio y largo plazo, la creación de herramientas predictivas de remodelación y regeneración y la reconstrucción en 3D, según han informado desde la UZ.
El trabajo ha sido premiado en el I Encuentro Triple Hélice como mejor proyecto de colaboración con el mundo de la empresa, dado que ha integrado ciencia, industria y salud buscando la mejora de la competitividad, el ahorro para los sistemas públicos sanitarios y la mejora de la calidad de vida de los pacientes con fracturas óseas.
El proyecto se ha desarrollado de manera conjunta con la empresa Materialise, especializada en impresión 3D y software con aplicaciones clínicas. También ha participado la Universidad Católica de Lovaina (Bélgica) y se ha colaborado con el Servicio de Traumatología del Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa de Zaragoza.
Los investigadores de la Universidad de Zaragoza involucrados en CAD-BONE han realizado estancias de un mínimo de dos meses en las instalaciones de esta empresa en Bélgica y los investigadores de la empresa Materialise han estado en la Escuela de Ingeniería y Arquitectura de la Universidad de Zaragoza trabajando con los equipos del grupo M2BE.
Para quienes participan en CAD-BONE, el éxito es la aportación de las tecnologías para que sean aplicadas a herramientas clínicas en la recuperación de hueso.
Grupo M2BE
Se trata de un proyecto financiado por el séptimo Programa Marco de Investigación y Desarrollo, como una acción Marie Curie IAPP. Esta modalidad de proyecto ha sido creada para tender puentes entre la investigación universitaria y el desarrollo empresarial y lograr una repercusión directa en la sociedad.
El grupo M2BE del Instituto de Investigación en Ingeniería de Aragón (I3A), a través de su investigador principal, José Manuel García Aznar, también consiguió en 2012 un Proyecto Europeo Starting Grant de 1,3 millones de euros y cinco años de duración del Consejo Europeo de Investigación para avanzar en el entendimiento de cómo las células trabajan de manera conjunta interaccionando con los tejidos y con el microambiente en el caso sano y ante diferentes patologías o enfermedades degenerativas.
Las Starting Grants son ayudas que se conceden a aquellos investigadores jóvenes que destacan ya en sus comienzos, con el fin de apoyar y reconocer a los mejores talentos de Europa en su trayectoria profesional.