La Comisión Europea ha dado este martes luz verde a la venta de la filial de equipos médicos de la japonesa Toshiba (Toshiba Medical Systems) al fabricante tecnológico del mismo país Canon, al concluir que la operación no tendrá un impacto negativo en el espacio económico europeo.
Bruselas considera que el posible solapamiento de las actividades de ambas empresas en el sector de los sistemas de diagnóstico por imagen no planteará problemas de competencia, porque su posición quedará limitada en Europa y tendrá competidores fuertes, como son Trixell, General Electric y Carestream.
El examen, que fue notificado al Ejecutivo comunitario el pasado 12 de agosto, ha sido examinado por los servicios de la Comisión bajo el procedimiento simplificado que se aplica a los casos menos problemáticos.
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