La Asociación Española de Bioempresas (Asebio) ha presentado este miércoles su
Informe Asebio 2020 que recopila todos los datos de
la biotecnología española en un año decisivo para el sector. Una de las principales conclusiones de este documento es que España pasa a ser la
octava potencia mundial en producción científica en biotecnología.
El evento ha tenido lugar en el
ICEX España Exportación e Inversiones con la presencia de la secretaria de Estado de Comercio del Ministerio de Industria y presidenta de ICEX,
Xiana Méndez; y del ministro de Ciencia e Innovación,
Pedro Duque y con la colaboración de Merck.
La presidenta de Asebio,
Ana Polanco, ha destacado el protagonismo y la resiliencia de la biotecnología en plena crisis. “La ciencia y la innovación nos están permitiendo
recuperar nuestra vida cotidiana frente al fuerte impacto de la pandemia”. En efecto, las cifras demuestran una respuesta y un
crecimiento de la industria biotecnológica en este
2020 a todos los niveles.
Crece la producción científica
Las compañías han
aumentado un 70 por ciento el lanzamiento de productos y servicios al mercado gracias a los productos relacionados con el
coronavirus Covid-19. En esta misma dinámica, las empresas dedicadas a esta industria innovadora siguen su expansión de manera significativa alcanzado
3.585 empresas, de las que 790 tienen a la biotecnología como actividad principal, según los últimos datos disponibles.
La actividad de todas estas empresas ha generado más de 10.100 millones de renta, lo que supone el 0,8 por ciento del PIB nacional y su facturación de
casi 12.000 millones de euros, sube al 1 por ciento del PIB. Además, contribuyeron con 117.700 empleos,
el 0,6 por ciento del total del empleo nacional.
Alejandra Davidovics, directora de la planta biotecnológica de
Merck en Tres Cantos, ejemplo claro de que se puede investigar y producir en España, ha declarado, en línea con estos datos, que “el tejido industrial de la biotecnología permite un sistema sanitario más resiliente y mejor preparado para
futuros retos, además de generar riqueza y empleo de alta productividad".
La colaboración y la inversión, claves para seguir creciendo
“Esto ha sido posible gracias a
un esfuerzo titánico del sector biotecnológico y a una colaboración inédita entre todos los agentes del sistema”, ha declarado también Polanco. Esto se ve reflejado en algunos de los datos más relevantes del informe. La biotecnología ha buscado nuevos productos, desde test de diagnóstico hasta tratamientos y vacunas, para hacer frente al Covid-19 estrechando vínculos con los otros agentes del sistema. Las
‘biotech’ han cerrado un 59 por ciento más de alianzas que el año anterior y
el 40 por ciento fueron con entidades del sector público.
En la misma línea, la inversión privada en las ‘biotech’ españolas
aumenta casi un 50 por ciento en 2020. Este año se ha superado los 150 millones de euros en capital privado, como adelantamos hace unas semanas. Además, el volumen de las operaciones con
participación internacional vuelve a aumentar este año, rozando los 100 millones de euros.
La industria biotecnológica es intensiva en conocimiento lo que la convierte en el sector con mayor porcentaje de investigadores
sobre el total de empleados. Además, las ‘biotech’ cuentan con casi un 60 por ciento de mujeres trabajando en actividades de I+D,
un porcentaje muy superior a la media de otros sectores.
“Desde el Gobierno queremos
acompasar el crecimiento del sector de la biotecnología. Es una inyección de esperanza a pesar de las circunstancias difíciles”, ha concluido
el ministro de Ciencia e Innovación, Pedro Duque, durante la clausura de la presentación.
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