Redacción. Madrid
El uso de ecografía más mamógrafo eleva un 55 por ciento la probabilidad de detectar tumores de mama en el caso de la tecnología GE Healthcare (y, más en concreto, de su nuevo modelo ecográfico ‘ABUS’).
Esta tecnología, que GE Healthcare lanza en España, permite, además, realizar la prueba en una media de tan solo 15 minutos por paciente. Los tejidos de mamas densas hacen muy difícil detectar lesiones patológicas cuando son todavía muy pequeñas. “Así pueden explicarse los diagnósticos tardíos y los casos de cáncer de intervalo” (casos de cáncer que “aparecen” entre dos pruebas), según ha puntualizado László Tabar, profesor emérito de Radiología en la Facultad de Medicina de la Universidad de Uppsala (Suecia).
Prueba adicional a la estándar
En efecto, la mamografía tradicional ya no es la única herramienta para diagnosticar y monitorizar el tratamiento de los tumores de mama.
De hecho, durante los últimos años se han ido aplicando de manera constante nuevas tecnologías que aportan información complementaria fundamental no solo para poder mejorar el diagnóstico y localizar tumores ocultos, sino también para incrementar la comodidad de las pacientes reduciendo el tiempo necesario para la exploración y el nivel de radiaciones ionizantes.
Se trata, por ejemplo, de tecnologías como la tomosíntesis digital, que aporta información clínica con menos radiación y mejora la detección de lesiones; o de otras como la resonancia magnética y la ecografía, que no utilizan radiaciones ionizantes.
Tal como ha explicado Sabina Cortés, responsable de Ecografía Automática de Mama de GE Healthcare, “hoy disponemos de diferentes tecnologías y cada una de ellas tiene una aplicación específica según las necesidades del equipo médico y del propio paciente; lo importante es que el equipo médico disponga de la tecnología adecuada en cada caso”.