El Servet inaugura Unidad de Arritmias y Electrofisiología

Mejorará a pacientes que requieran de intervenciones realizadas a través de catéteres

Lunes, 18 de enero de 2016, a las 16:04
Redacción. Zaragoza.
El Hospital Universitario Miguel Servet ha puesto en marcha una Unidad de Arritmias y Electrofisiología cardíaca puntera en España, tanto por su dotación tecnológica como por sus dimensiones, concepto e infraestructura conjunta, para aportar una asistencia eficiente y de calidad a pacientes con enfermedades del ritmo cardíaco que pueden curarse o mejorarse mediante intervenciones realizadas a través de catéteres (ablación con catéter).


Javier Lambán, presidente de Aragón, junto al consejero de Salud, Gabriel Celaya.


Se trata de un espacio de más de 500 metros cuadrados que aprovecha dos accesos naturales del propio hospital, uno para la entrada para intervenciones de pacientes hospitalizados y otro para pacientes ambulatorios que acuden a consulta de arritmias o consulta de revisión presencial de marcapasos y desfibriladores.

Cuenta con zona de administración y logística, y dos salas (quirófanos) para electrofisiología intervencionista dotadas de la más moderna tecnología en este campo, que son servidas mediante un amplio control común, y que están complementadas con un sistema de documentación y post-procesado de imágenes y registros único en España, desarrollado conjuntamente con Telefónica Solutions y que está destinado a ser una innovadora herramienta fundamental para el aprendizaje, la docencia y la investigación clínica.

También hay una pequeña sala para realizar procedimientos no invasivos como cardioversión eléctrica o técnicas quirúrgicas menores bajo sedación; otra dotada de monitorización del electrocardiograma y constantes vitales para el paciente en recuperación tras completar el procedimiento en espera de su traslado a hospitalización; y una tercera de docencia y reunión con las últimas tecnologías audiovisuales.

Además, existe una sección de monitorización remota de dispositivos (desfibriladores y marcapasos) desde donde el personal de enfermería, supervisado por especialistas y con el apoyo externo de un centro de soporte y seguimiento de estos aparatos, controla el correcto funcionamiento de los pacientes portadores de marcapasos o desfibriladores.