El Hospital Virgen de la Arrixaca y la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) trabajan en un
prototipo para controlar el
crecimiento óseo de los pacientes a distancia a través de una
plataforma de Stewart, también conocido como plataforma de seis ejes,
robot paralelo o 'hexápodo', que se ha usado incluso en la NASA, "y que se está usando en pequeña dimensión para
corregir deformidades óseas".
En declaraciones a
Europa Press, el coordinador de la Unidad de Ortopedia Infantil del Hospital Universitario Virgen de la Arrixaca,
César Salcedo, explica que con este prototipo, que consiste en una estructura de aros unidos por seis tubos o
struts, agarrado al hueso, "podemos controlar mediante
procedimientos matemáticos la corrección de las deformidades".
De tal forma, acentúa el especialista, que un programa de ordenador "nos puede informar sobre las veces que tenemos que jugar con esos seis tubos columnas o
struts para corregir deformidades", siendo "mucho más exacto que el ojo humano".
Salcedo explica que los seis
postes telescópicos -barras oblicuas que unen los 2 anillos- que conforman el hexápodo pueden
corregir múltiples planos, incluso rotar, variando coordinada y milimétricamente las barras oblicuas.
El 'hexápodo' utilizado para corregir pequeñas deformidades óseas
|
Mientras el fijador externo circular clásico (tipo Ilizarov) corrige deformidades a través de una bisagra colocada en el lugar exacto del hueso, algo que dependerá de la destreza del cirujano, el hexápodo lo hace mediante una
"bisagra virtual" ayudada por el tratamiento matemático de un
software.
"Ello nos permite no sólo unas correcciones más precisa, sino también la rectificación de una planificación inadecuada o por el cambio de eje del hueso", señala Salcedo.
Cinco años
La Arrixaca lleva más de cinco años utilizando el fijador externo tipo 'hexápodos', pero es una
práctica que se ha ido modernizando, según explica Salcedo, que contactó recientemente con la UPCT a fin de mejorar y evitar errores de corrección en los pacientes "mediante unos
sensores que indicaran
vía teléfono móvil si el paciente en su casa estaba haciendo bien la corrección".
De tal forma que "con una información sin cables vendría a contar lo que hace el paciente todos los días y se recogería en un
registro". De hacerlo mal, saltaría una alarma para llamarlo o citarlo a la consulta, "lo que evitaría errores y los desplazamientos del paciente", que suelen ser de otras comunidades autónomas, y tiene que seguir revisiones muy a menudo.
Proceso "constante y a distancia"
Y es que para que el crecimiento del hueso se produzca, son
los propios pacientes los que deben girar una serie de tuercas todos los días varias veces. Un proceso que puede alargarse si eso no lo hacen bien pero con el sistema desarrollado por la UPCT "se podría hacer de forma constante y a distancia".
Una mejora tecnológica, subraya Salcedo, "que supone un gran avance de cara a la
recuperación de los pacientes dado que la información que reciben los sensores se traslada a un 'software' al que podemos tener acceso los médicos, y desde ahí se sigue la
evolución de los pacientes, si están realizando correctamente los pasos que se les indican o si están cometiendo errores".
Un proyecto, de la ingeniera
Laura Valdez, dirigido por el investigador
Miguel Almonacid y codirigido por
José Manuel Cano Izquierdo, acentúa el doctor, que ha sido galardonado con el premio de la
Cátedra MTorres a la temática
'Soluciones más Innovadoras y de Talento en el Ámbito de la Ingeniería', por su Trabajo Final de Estudios titulado
'Sensorización de un robot paralelo para aplicaciones médicas', dentro de la 5ª Edición de los Premios a los Mejores Trabajos Fin de Grado y Trabajos Fin de Máster 2017/2018.
Aunque pueda contener afirmaciones, datos o apuntes procedentes de instituciones o profesionales sanitarios, la información contenida en Redacción Médica está editada y elaborada por periodistas. Recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.