"No estar en temas como los algoritmos o la IA es no estar en la Medicina"

La tecnología de la información ha llegado para quedarse y el sector sanitario no está exento de ello. Las nuevas herramientas traen oportunidades, como el desarrollo de nuevas profesiones sanitarias, pero también ciertas ‘responsabilidades’, como la actualización de los médicos para adaptarse a ellas, pero no sería una formación "especialmente costosa".

Ignacio H. Medrano es neurólogo y experto en inteligencia artificial (IA). En su opinión, se corre "en cierto modo" el riesgo de los facultativos más mayores puedan quedarse atrás si no se adaptan a las nuevas tecnologías. "No estar en cuestiones como los algoritmos o la inteligencia artificial es no estar en la Medicina, como hace unos años habría sido no estar en la llegada de la resonancia magnética, por decir algo", explica.

Pero no es una cuestión que le preocupe por el propio carácter de la profesión: "Los facultativos en general tenemos flexibilidad y capacidad de adaptarnos; creo que para la mayoría no será un problema".

Además, el experto hace distinción entre dos perfiles diferenciados de médicos: los punteros e investigadores, que están detrás de sacar los algoritmos adelante; y los que son usuario de algoritmos, cuya formación necesaria no es tanta. "No es tan distinto el producto que acabas obteniendo cuando lo haces con estadística clásica a cuando lo haces con inteligencia artificial. Por tanto, para el usuario clínico es necesaria una cierta actualización, pero que no es especialmente costosa", detalla.

El concepto de médico innovador

Medrano sostiene que la inteligencia artificial avanza a un gran ritmo. Para ahondar en ello, incide en como The New England Journal of Medicine ha sacado una división de inteligencia artificial y que este término empieza a formar parte de congresos, guías clínicas, aprobaciones de la FDA sobre sistemas de IA…

"Pensar en una Medicina sin inteligencia artificial empieza a no tener sentido"

Incluso los servicios de salud de los países ya empiezan a incorporarla, incluido España. También comienza a formar parte los centros: los gerentes se forman para invertir en ella y se cuenta con partidas y presupuesto para ello, tal y como detalla.

"Pensar en una Medicina sin inteligencia artificial empieza a no tener sentido", resume. Pero estos cambios llegaron incluso antes del Chat GPT. "Probablemente, Chat GPT no sea lo que más influye en el campo, sino unos algoritmos mucho más robustos desde el punto de vista de decisión clínica que se están fabricando a través de todas las especialidades desde hace ya unos años y que ahora están en fase de validación, en fase de ensayo clínico", detalla.