La
tecnología sanitaria tiene un papel clave en la seguridad del paciente. La robotización, la automatización, la digitalización, las nuevas técnicas de diagnóstico in vitro y diagnóstico por imagen facilitan diagnósticos más precisos y precoces y tratamientos menos invasivos y eficaces que permiten recuperaciones más rápidas y una menor exposición a los riesgos de la asistencia sanitaria. Las empresas del sector están muy comprometidas con ello, algo que conmemoran en el
Día Mundial de la Seguridad del Paciente, que se celebra
el 17 de septiembre.
Ana Lázaro, representante de la Comisión de Seguridad en la Asistencia Sanitaria de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (
Fenin), analiza en una entrevista con
Redacción Médica el trabajo del sector por y para la seguridad del paciente y los profesionales sanitarios, así como los principales desafíos a los que se enfrentan, como la obsolescencia de los equipos en los hospitales.
Entrevista completa a Ana Lázaro, representante de la Comisión de Seguridad en la Asistencia Sanitaria de Fenin.
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El sistema sanitario español se encuentra inmerso en un proceso de transformación hacia un sistema más moderno, digital y eficiente, pero, ¿puede hablarse de eficiencia si no se garantiza la seguridad de la asistencia sanitaria?
Yo creo que no. Los problemas de seguridad del paciente en la atención sanitaria suponen
enormes costes de morbi-mortalidad para el paciente y económicos para los sistemas, por lo tanto, garantizar la eficiencia si no se cuidan estos aspectos no tendría ningún sentido. Las empresas y sus organizaciones representativas tenemos que implementar medidas que vayan dirigidas a atajar estas ineficiencias que se producen en el sistema.
Lo que se debe reforzar es el compromiso con la mejora de la calidad asistencial y la seguridad en las organizaciones sanitarias, formando e implicando a los profesionales y a los pacientes en la implementación de medidas encaminadas a
prevenir, evitar y reportar los eventos adversos.
La estandarización y mejora continua de los procesos posibilita alcanzar los
resultados de salud deseados a la vez que se consigue una asistencia sanitaria más segura para pacientes y profesionales.
Por esta razón se debería promover la implementación de
Sistemas de Registro y Notificación de eventos adversos en todos los hospitales, que permiten alertar de nuevos riesgos, compartiendo la información sobre nuevos métodos para prevenir errores y fomentar una
verdadera cultura de seguridad en todos los ámbitos de la asistencia sanitaria.
Los proyectos Zero son un buen ejemplo, ya que permiten estandarizar las buenas prácticas, homogeneizar los procesos sanitarios, disminuir las infecciones relacionadas con la asistencia sanitaria, y por lo tanto mejorar la seguridad del paciente.
No obstante, estos proyectos
se limitan a las UCIs, pero proporcionalmente la mayor proporción de infecciones se producen fuera de estas unidades. Por lo tanto, sería muy útil que este tipo de iniciativas se extrapolaran a otros servicios del hospital. Esto disminuiría el riesgo para los pacientes de adquirir una infección nosocomial, reduciría por tanto los costes sanitarios y además ayudaría en la lucha contra la resistencia a los antibióticos.
Ana Lázaro: "La tecnología sanitaria no puede aumentar el número de profesionales sanitarios, pero sí ayudarles a automatizar los procesos".
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¿Qué papel ocupa la tecnología sanitaria a la hora de garantizar un sistema sanitario, y una atención al paciente, más segura?
Las empresas de tecnología sanitaria fabricamos innovaciones que ayudan a mejorar la eficiencia y la eficacia de los procesos, lo que impacta directamente en mejorar la seguridad del paciente. La robotización, la automatización, la digitalización, las nuevas técnicas de
diagnóstico in vitro y diagnóstico por imagen facilitan diagnósticos más precisos y precoces y tratamientos menos invasivos y eficaces que permiten recuperaciones más rápidas y una menor exposición a los riesgos de la asistencia sanitaria.
Esto es importante porque según estimaciones de la
Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2030 existirá una escasez de 18 millones de trabajadores sanitarios en todo el mundo. Cuando hay pocos profesionales hay un impacto directo en la calidad de la asistencia sanitaria, y por tanto en la seguridad. Esta falta provoca altas tasas de mortalidad. ¿Cómo podemos ayudar a ello las empresas? Pues este es un ejemplo.
Nosotros no podemos aumentar el número de profesionales, pero sí podemos desarrollar tecnología que ayude a
automatizar los procesos. Todo eso va a redundar siempre en una mejora de la seguridad.
Hay otro aspecto muy importante a tener en cuenta que es todo lo que aporta la tecnología de la información, que permite explotar al
máximo el potencial de unas terapias y soluciones innovadoras que generan satisfacción en el paciente, en el cuidador, en el profesional sanitario y facilitan una gestión clínica integral, sin olvidarnos de su capacidad para generar un importante
ahorro de recursos.
Además, muchas empresas del sector se dedican a desarrollar soluciones para
prevenir infecciones en el ámbito ambulatorio, hospitalario, quirúrgico y domiciliario. Respecto a este último, también desarrollamos soluciones que ayudan al autocuidado del paciente en su domicilio, tanto si es debido a una hospitalización domiciliaria como si se trata de un paciente crónico. Estas soluciones también podrían ayudar con el problema de falta de profesionales sanitarios.
"Somos un sector tremendamente innovador, por eso es importante la formación de los profesionales sanitarios"
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Tan importante como garantizar el acceso de los profesionales sanitarios y los pacientes a soluciones tecnológicas innovadoras es facilitar la información necesaria sobre su funcionamiento y su uso seguro. En este sentido, ¿cuál es el compromiso de las empresas y de Fenin en la formación a profesionales y pacientes en el óptimo uso?
El compromiso es total. Estamos en un
sector tremendamente innovador, donde cada día aparecen nuevas soluciones y cada vez más complejas. Precisamente por eso, las empresas del sector estamos totalmente comprometidas con la formación de los profesionales sanitarios. Es crítico que puedan conocer las últimas novedades, que puedan estar informados de la tecnología que va saliendo pero también que puedan formarse en la correcta utilización de estas tecnologías para que los resultados sean los esperados. Incluso, realizando acciones formativas in situ, en los propios espacios hospitalarios donde se utiliza el equipamiento.
Fenin siempre ha estado comprometida con la
formación a profesionales de las empresas fabricantes de tecnología sobre regulación, normalización, medioambiente, evaluación, innovación, etc.., y su apuesta por el conocimiento y la formación sobre las tecnologías es absoluta, de hecho, es una de sus prioridades. La
Plataforma Feninfor, creada hace varios años, ha intensificado y facilitado aún más el acceso a dicha formación.
"Fenin siempre ha estado comprometida con la formación de profesionales de las empresas fabricantes de tecnología en cuanto a regulación, normalización, medioambiente, evaluación e innovación"
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¿Cómo se fomenta desde Fenin y su Fundación Tecnología y Salud la “cultura de la seguridad y la calidad” en la asistencia sanitaria?
La Fundación Tecnología y Salud promueve numerosos proyectos relacionados con la prevención de infecciones y con la seguridad de pacientes y profesionales. Son proyectos que están destinados a mejorar la calidad de la atención, un ejemplo es el de
Flebitis Zero, con la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública y Gestión Sanitaria, la Asociación de Buenas Prácticas en Seguridad de Pacientes (ABPSP) y la
Sociedad Española de Infusión y Acceso Vascular; así como el proyecto Sistema de acreditación en calidad de los Servicios de Medicina Intensiva, el Observatorio de Infección en Cirugía con la Asociación Española de Cirujanos y el Proyecto Homecare sobre Atención Domiciliaria con la Fundación Edad y Vida.
Otro ejemplo es la Comisión de Seguridad en la Atención Sanitaria de Fenin, que aborda la seguridad desde todos los ámbitos promoviendo esa cultura que es clave en una atención sanitaria de calidad. Desde la Comisión se apuesta por la promoción de los
Proyectos Zero, la colaboración conjunta para la prevención de los eventos adversos,
favorecer la incorporación de las innovaciones tecnológicas y promover el ahorro de costes con la aportación de la tecnología sanitaria y la compra basada en el valor.
Ana Lázaro explica en qué consiste la promoción de la cultura de seguridad del paciente.
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Una de las acciones ‘estrella’ en este ámbito es lo que denominan la 'Semana de la Seguridad' que celebran anualmente. ¿Cómo surge esta idea y qué objetivos persigue?
Con el compromiso que hemos hablado antes que tenemos desde Fenin de promover la
cultura de seguridad del paciente y coincidiendo con el
Día Mundial de la Seguridad del Paciente, que es el 17 de septiembre, se realiza esa semana una campaña de difusión y concienciación a través de medios de comunicación y redes sociales en la que cada día de se pone el foco en un proyecto, actividad, documento, novedad, etc.
Es el momento adecuado para dar a conocer, no solamente a los
profesionales sanitarios, sino a la sociedad en general lo importante que es la seguridad del paciente y todo lo que desde las empresas aportamos para conseguir este beneficio.
La seguridad también depende, en buena parte, de la ‘edad’ de vida de los equipos. En este sentido, España cuenta con un alto nivel de obsolescencia de los equipos que se está revirtiendo gracias al Plan Inveat. ¿Es necesario dar continuidad a este Plan?
Es absolutamente necesario. El
Plan Inveat ha sido una ayuda importantísima para mejorar esta obsolescencia y es fundamental que se siga trabajando y que no se quede simplemente en una única fase. Es verdad que está muy focalizado a determinadas familias de productos catalogados de alta tecnología, pero todavía persiste la obsolescencia en muchos otros equipos y tecnologías, lo que impide la incorporación eficiente de la
innovación tecnológica en beneficio de profesionales y pacientes.
Además de con el Ministerio de Sanidad, también hay que trabajar con las comunidades autónomas para realizar inventarios de equipos y diseñar una planificación adecuada para renovar el parque tecnológico de forma gradual. Es imprescindible que las CCAA dispongan de presupuesto para seguir invirtiendo en la
compra de tecnología, que no se quede solo en el Plan Inveat, y también es crítico que los presupuestos contemplen todos los costes derivados de estos equipos como es el mantenimiento, la amortización, etc.
Es decir, no solo hay que disminuir la obsolescencia de los equipos, sino abogar para que se dote de presupuesto a los servicios sanitarios para poder seguir mejorando y llegar a toda la tecnología que tenemos en España.
La compra pública por valor, uno de los temas 'estrella' de la entrevista con Ana Lázaro.
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La seguridad y calidad de los resultados en salud también puede apuntalarse desde el mismo proceso de compra pública de tecnología sanitaria. En este sentido, Fenin aboga por priorizar criterios como el valor frente al precio en estos procedimientos. ¿Por qué es importante esta cuestión?
Debemos dirigirnos hacia una
contratación pública sostenible que valore la calidad y el servicio que aportan las empresas y los resultados en salud. Un ejemplo es la formación aportada por las empresas de tecnología sanitaria que debería ser valorada en los procesos de licitación y adquisición de tales tecnologías.
Favorecer la
compra basada en valor como establece la Ley de contratos del Sector Público, es la mejor garantía para que el sistema cuente con tecnología sanitaria de calidad que le permita responder a las necesidades asistenciales garantizando la seguridad y calidad de los productos.
Se deben tener en cuenta criterios de calidad, sociales, medioambientales y de innovación en los procedimientos de compra que contemplen la relación calidad-precio, teniendo en cuenta el ciclo completo de cuidados y los resultados obtenidos (individuales y poblacionales) y el
conjunto de costes del ciclo de vida del producto.
La falta de seguridad y la ineficiencia del sistema, así como el agotamiento de recursos asistenciales y económicos, tiene en los errores de la medicación uno de sus principales agujeros. ¿Cómo puede ayudar la digitalización en la lucha contra este problema?
Uno de los principales eventos adversos son los
errores de medicación. La complejidad del sistema de gestión de los medicamentos, que incluye los procesos de selección, prescripción, validación, dispensación, administración y seguimiento es cada vez mayor, lo que conlleva un mayor riesgo de que se produzcan errores y de que éstos, a su vez, causen eventos adversos a los pacientes.
Es importante poner barreras para evitar daños. Desde las empresas de tecnología sanitaria estamos desarrollando soluciones que nos permitan digitalizar el proceso, incluyendo innovaciones que permitan, por ejemplo, la identificación inequívoca del paciente y del medicamento, la administración del tratamiento mediante
bombas inteligentes, y que en general garantice la
trazabilidad total del proceso completo.
Por esta razón, la Comisión de Seguridad en la Atención Sanitaria de Fenin y la Fundación Tecnología y Salud apoyan la
Alianza Multidisciplinar Frente a los Errores de Medicación (Proyecto AFEM), constituida por el
Foro Español de Pacientes (FEP) junto a 25 sociedades científicas y profesionales y el aval de la Sociedad Española de Calidad Asistencial cuyo objetivo principal establecer un protocolo e infraestructura para prevenir los errores de medicación y así preservar la seguridad del paciente.
La falta de seguridad tiene en los errores de medicación uno de sus principales agujeros
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Otro de los puntos en los que incidir hace referencia a la prevención de las infecciones, no solo en los espacios clínicos, como los quirófanos, sino también en otros entornos asistenciales fuera de los hospitales, como las residencias, ¿no?
Por supuesto. En
residencias y domicilios también es necesario invertir en seguridad y el papel de la tecnología para la prevención es también clave en estos entornos, en los que la mayoría de las personas con enfermedades crónicas prefieren ser atendidos.
La Comisión de seguridad está comprometida también con iniciativas como el
proyecto Homecare de la Fundación Tecnología y Salud y la Fundación Edad & Vida que pone sobre la mesa la importancia de utilizar las nuevas herramientas que ofrece la tecnología en domicilios y residencias para el seguimiento y control adecuado y seguro de las enfermedades.
El compromiso de Fenin con la seguridad del paciente es total. Nuestro objetivo es
mejorar la salud y la calidad de vida de los pacientes.
Ana Lázaro: "El objetivo de Fenin es mejorar la salud y la calidad de vida de los pacientes".
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