La Unidad de Hemodinámica del Hospital General Universitario de Elche ha cumplido un año atendiendo las 24 horas del día y los 365 días del año a los pacientes que lo requieran. Al frente de la misma está Paula Tejedor, licenciada en Medicina por la Universidad de Valladolid y especialista en Cardiología por el Hospital Clinico Universitario de esta ciudad, y desde 2018 en el Hospital General Universitario de Elche.
Una labor que la facultativa analiza en esta entrevista, donde responde a las ventajas de la innovación en un Servicio reforzado en su cobertura asistencial.
¿Qué importancia tiene para la calidad asistencial de un hospital que su Unidad de Hemodinámica preste atención los 365 días del año y las 24 horas?
Para toda unidad de Hemodinámica y Cardiología Intervencionista es esencial dar cobertura a nuestros pacientes no sólo durante el horario laboral. Además, aparte de prestar un mejor servicio a la población de referencia, resulta también fundamental para la formación y la experiencia de los médicos y la enfermería. Atender durante las 24 horas del día los 365 días del año implica tener más volumen de pacientes y un aumento de la atención a los pacientes más graves, y eso siempre repercute en una mejoría de la calidad asistencial, indiscutiblemente.
Ustedes llevan ya un año formando parte del sistema valenciano ‘Código Infarto’, ¿qué le ha supuesto algo así a la Unidad?
Fundamentalmente, un cambio en cuanto al aumento de la plantilla de médicos, enfermeros, auxiliares de enfermería, celadores, etcétera. Y, al margen de los recursos humanos, desde el punto de vista asistencia ha supuesto, como antes comentaba, el poder dar cobertura las 24 horas del día, los 365 días del año, a los pacientes al Área Sur de la provincia de Alicante. Aunque antes ya formábamos parte del Código Infarto, pero sólo prestábamos atención de lunes a viernes de ocho de la mañana a tres de la tarde, lo cual implicaba que, fuera de ese horario y en días festivos, los pacientes de nuestra área de referencia tenían que ser derivados al Hospital General de Alicante para ser atendidos. Ahora, con la ampliación de este servicio, se acorta el tiempo de atención, y eso mejora el diagnóstico y la supervivencia de los pacientes, que son los principales beneficiados.
¿Qué balance hacen de este año con el mencionado funcionamiento de 24 horas y 7 días a la semana de la Unidad?
El balance es muy positivo. Hemos formado un equipo dentro de la Unidad de Hemodinámica con muy buena respuesta de todos los profesionales que formamos parte de ella, con el doctor Pedro Morillas, jefe de Servicio de Cardiología, al frente. Para él era de vital importancia que nuestra unidad formara parte del Código Infarto las 24 horas, y estar ahí de manera completa, y no parcial como hasta hace un año, hace que la Unidad haya crecido en términos de personal, con gente que se ha incorporado con muchas ganas.
Además, hay que tener en cuenta que se ha atendido a 350 pacientes en lo que llevamos de año a través del Código Infarto, y como dato muy relevante está el hecho de que, de esos 350 pacientes, sólo el 13 por ciento de las atenciones han tenido lugar entre las ocho de la mañana y las tres de la tarde, lo cual pone de relevancia lo necesario que era para nuestro hospital y nuestra área de referencia formar parte del Código Infarto las 24 horas.
¿De qué forma la innovación tecnológica les ayuda a dar respuesta a los pacientes que acuden a su Unidad?
La innovación tecnológica es fundamental. En nuestro caso, la mayor innovación tuvo lugar en 2020, en la que se renovó el equipo radiológico de la sala de Hemodinámica. El que había hasta entonces llevaba mas de 15 años funcionando y era un equipo antiguo. El disponer de uno nuevo con mucha menor dosis de radiación tanto para el paciente como para los profesionales, y con una calidad de la imagen obtenida muy superior al equipo antiguo ha supuesto un enorme cambio positivo. Pero es cierto que esa innovación tecnológica ya estaba hecha antes del inicio del Código Infarto las 24 horas, así que la mayor innovación ha sido en el ámbito de los recursos humanos.
¿Les ha afectado de alguna forma el tantas veces mencionado déficit de profesionales sanitarios para poder dotar de facultativos y resto de personal a una Unidad que trabaja 24/7?
No, afortunadamente, no ha habido problemas en ese sentido. Es verdad que una de las cuestiones por las que se demoró la concesión del Código Infarto 24 horas fue que el aumento de personal que conllevaba, también tenía que ir ligado a una mayor inversión, pero, una vez que desde la Conselleria de Sanitat se nos concedió la dotación económica para poder contratar al personal necesario, el encontrar a profesionales no fue un problema.
Tras este año de mejora tecnológica y asistencial de la Unidad, ¿qué mejoras esperan en un futuro a corto o medio plazo?
Entre los planes de futuro tanto de Pedro Morillas como los míos, como responsable de la Unidad, están el poder disponer no de una sala de Hemodinámica, sino de dos, para poder aumentar nuestra capacidad asistencial. Por otro lado, en el campo de la cardiopatía estructural, contamos con un programa de intervencionismo que engloba foramen oval permeable, comunicaciones interauriculares y cierre de orejuela izquierda, y en nuestro horizonte está el deseo de ampliar esa cartera de servicios y, así, poder implantar prótesis aórticas de manera percutánea, como ya se está haciendo en otros centros.
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