Vocación y chasco por las guardias 24h para una nueva generación de médicos

La Medicina requiere vocación, esfuerzo y sacrificio desde el primer momento, o incluso antes. Acceder a esta titulación universitaria no es tarea fácil, ya que la nota de corte necesaria para conseguirlo roza la perfección, tanto en Bachillerato como en EBAU. Sin embargo, quienes persiguen de manera incansable este sueño, llegan a la universidad en muchos casos sin conocer cuestiones relativas al Sistema Nacional de Salud (SNS) y a la profesión médica como las guardias de 24 horas, el examen MIR o el abanico de especialidades médicas del que disponen.

La mayoría de alumnos de instituto que quieren estudiar esta carrera universitaria comparten el deseo de "ayudar a los demás". Esto es lo que mueve a Cristina Casado, estudiante de 2º de Bachillerato en el Instituto de Educación Secundaria (IES) Las Musas, de Madrid. También hay quienes despiertan su vocación a partir de vivencias personales, como su compañera de curso y centro, Valentina Argüello. "En 2019 se murió mi abuelo de cáncer de pulmón y fue un golpe muy duro. Creía que podía ayudar al resto de personas que pasaran una situación parecida a la mía, o por lo menos estar en el otro lado", sostiene.

Alumnos de Bachillerato hablan del MIR y las guardias

Al preguntarles por la Formación Sanitaria Especializada (FSE) y en concreto el examen MIR, la mayoría de estudiantes de instituto reconoce haberse informado a través de redes sociales como TikTok. Elena Lozano, todavía en el primer año de Bachillerato del mismo centro, sabe que es una prueba "muy difícil" para elegir especialidad, aunque cree que la 'recompensa' es "trabajar" en la misma, y no acceder a una plaza de formación con fecha de caducidad.

Natalia Pescador, compañera de Lozano, va un paso más allá y asegura que ha oído hablar de la preparación, de las academias o de la duración de la prueba y el recibimiento tras la misma. Alba Rangil, alumna de la misma clase, añade que algunas especialidades están más cotizadas que otras y que, por lo tanto, es más difícil acceder a ellas.

Elena Lozano y Claudia Seano examinando réplicas del cuerpo humano en el IES Las Musas (Madrid).

Una de las mayores sorpresas para todas estas alumnas ha sido el funcionamiento de las guardias médicas de 24 horas, uno de los grandes desconocidos fuera del ámbito sanitario. Lozano reconoce que no lo había escuchado nunca, y vaticina que consisten en "vigilar durante mucho tiempo". Al saber su verdadero mecanismo, esta estudiante ha reconocido, asombrada, que es algo "muy duro". Su compañera Claudia Seano sí que sabía, a grandes rasgos, cuál era la metodología de estas jornadas, y alude a la vocación como motor para afrontarlas. Por su parte, Casado considera que es "un poco exagerado para los médicos principiantes", y que "pone en riesgo sus horas de sueño y su capacidad para antender a los pacientes".

Con la EBAU cada vez más cerca, varias de ellas han contemplado qué pasaría si no pudiesen alcanzar la nota necesaria para Medicina. Celia Sánchez, alumna de 1º de Bachillerato, contempla dos alternativas: entrar a Medicina a través de una FP o estudiar otras carreras como Veterinaria o un Doble Grado de Psicología y Criminología. Argüello tiene este supuesto muy presente, y también ha trazado un "plan B" que consiste en estudiar Enfermería o, al igual que Sánchez, acceder a la formación médica mediante un Grado Superior.

Alba Rangil, Celia Sánchez y Natalia Pescador junto a un simulador de su instituto.