Vacunas: Sanidad valora Pfizer en ancianos y AZ para 'salvar' la economía

Riesgo de morbilidad y mortalidad; riesgo de exposición; impacto socioeconómico; y riesgo de transmisión. Estos son los cuatro pilares sobre los que se sustenta la Estrategia de Vacunación en España que, a partir del análisis de estas variables, determina el orden en el que deben vacunarse los diferentes grupos de población. Sin embargo, hay uno que prima sobre el resto en la actualidad: evitar las muertes. Por eso, los asesores del Ministerio de Sanidad consideran que las personas mayores de 65 deben recibir la vacuna de Pfizer-Biontech, con eficacia demostrada en dicho colectivo; mientras que la de Astrazeneca debe destinarse a reducir el impacto socioeconómico de la pandemia. La decisión sobre este aspecto se tomará el próximo jueves.

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Fuentes presentes en las deliberaciones del Grupo de Vacunas advierten a Redacción Médica que, en el contexto actual, "debe primar el riesgo de mortalidad" a la hora de tomar decisiones, por ejemplo, sobre a quién administrar la vacuna de AstraZeneca, cuyos resultados no se han testado en población mayor de 65 años. 

"No es lo mismo estar en una situación valle, con los ingresos y la mortalidad que teníamos en diciembre, que la situación actual. Parece que estamos saliendo, pero los datos son dramáticos", advierten dichas fuentes, que creen que lo "importante ahora es centrar las vacunas más eficaces en las personas más mayores, siempre que haya evidencia de que se pueden usar en ellos en los resultados de los ensayos".

"Lo importante es centrarnos en la prevención de la mortalidad, lo que exige priorizar a los mayores dentro de las vacunas disponibles, que es el riesgo que prima", argumenta. De esta forma, las vacunas cuya seguridad está garantizada pero tienen una eficacia menor en determinados sectores de la población, "se deben empezar a destinar a otros grupos", considera este experto. 

Prioridad: prevenir muertes, no contagios

Dada la evolución epidemiológica, lo prioritario "no es prevenir contagios, sino prevenir fallecimientos". De hecho, en la tercera ola de la pandemia en España, que ha sacudido de forma importante también a las residencias de mayores, la mortalidad es menor a los trágicos datos registrados durante la primera ola. "Si no hubieramos orientado la estrategia a mayores internos de forma prioritaria, sería mucho mayor. Es un dato que tiene que llevar al optimismo, parece que hemos acertado salvando vidas", se felicita.

Por ello, y en base a la información que llega desde Europa, considera óptimo "reservar" la vacuna de AstraZeneca para las personas menores de 65 años. "Es una vacuna segura, con una eficacia alta. Pero, si hoy por hoy tenemos una vacuna con una eficacia mayor, destinémosla a prevenir la mortalidad", argumenta. 

En su opinión, mientras la vacuna de Pfizer-Biontech o la de Moderna deben destinarse a proteger el riesgo de mortalidad que prima sobre los otros riesgos contemplados en la Estrategia, la de AstraZeneca puede estar enfocada a prevenir el riesgo socioeconómico, también contemplado en el documento elaborado por Sanidad. 

Una opinión respaldada por sociedades y CCAA

Fuentes de la Asociación Nacional de Enfermería y Vacunas (Anenvac) coinciden en 'reservar' el fármaco de AstraZeneca para grupos menores de 65. “Se podría reservar este fármaco para grupos de riesgo, menores de 65 años, y utilizar las de los laboratorios Pfizer y Moderna para los mayores”, aseguran. Fuentes autonómicas también han admitido a Redacción Médica que este planteamiento es "lógico". 

Por su parte, Jaime Jesús Pérez, vocal de la Asociación Española de Vacunología, explica que la de Astrazeneca, "es una vacuna con una eficacia buena, que puede servir para cubrir un hueco importante en cuanto a muchas personas que tienen que vacunarse, para las que todavía no tenemos vacuna".