"Me siento incómodo y / o ansioso por usar un
software impulsado por la
inteligencia artificial". Esa fue la respuesta de aproximadamente
un tercio de los médicos en Europa (35 por ciento) en una encuesta de 'Medscape' sobre el uso de estas tecnologías entre los profesionales sanitarios.
En general, según los resultados, los médicos aún se encuentran un poco reticentes a usar esta tecnología. A pesar de ser que en España fue una de las
apuestas fuertes en Sanidad durante la última legislatura.
"La
inteligencia artificial permitirá
ahorrar miles de millones de euros al mejorar la
prevención, el
diagnóstico y el
tratamiento de la
obesidad infantil, las
enfermedades cardiovasculares y sus secuelas, las enfermedades
neurodegenerativas y el
cáncer de mama, entre otros ámbitos",
explicó el Gobierno (ahora en funciones) en la presentación del proyecto de Estrategia Española de I+D+i en Inteligencia Artificial.
Encuesta a 1.500 médicos
Para las encuestas de 2018 y 2019, Medscape encuestó a
1.500 médicos (500 de Europa, 500 de América Latina y 500 de Estados Unidos) para evaluar su opinión con respecto a la IA. Este año, el equipo global amplió la encuesta con preguntas adicionales y presentó los hallazgos en la reunión de eyeforpharma en Barcelona, España, en marzo.
Precisamente, entre los los países europeos encuestados se incluyó a España junto a Francia, Alemania, Italia, y el Reino Unido. El 37 por ciento de estos médicos
expresaron "temor" de que el software impulsado por IA pueda ser una
amenaza para e
l rol del médico.
Además, los encuestados de las tres regiones también informaron que usban poco los altavoces inteligentes controlados por voz, como
Alexa de Amazon o
Google Home, en sus prácticas (entre el 8 y el 16 por ciento en total). El uso fue mayor entre los profesionales de 34 a 44 años que entre los grupos de edad mayores y menores, informan los autores.
Cuando se les preguntó para qué usarían teóricamente los altavoces inteligentes en sus prácticas, los médicos dijeron que lo harían para
buscar información de medicamentos (54 por ciento), verificar
interacciones medicamentos (53 por ciento), consulta
r pautas de tratamiento (52 por ciento) o
buscar información de una enfermedad (49 por ciento).
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