Supercontagiadores Covid: ancianos y obesos exhalan más aerosoles

¿Quiénes son los supercontagiadores del Covid-19? Los expertos llevan meses intentando dar respuesta a esta pregunda. Ahora, investigadores de la Universidad de Tulane, la Universidad de Harvard, el MIT y el Hospital General de Massachussets ha descubierto que las personas mayores y con obesidad tienen más capacidad de transmitir el nuevo coronavirus con eficacia. Y, por tanto, provocar mayores consecuencias. 

En concreto, los investigadores han descubierto que la obesidad, la edad y la infección por Covid-19 se correlacionan con la propensión a exhalar más aerosoles, los principales transmisores del SARS-CoV-2. Sus conclusiones fueron publicadas en Proceedings of the National Academy of Sciences.

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Utilizando datos de un estudio observacional de 194 voluntarios y un estudio experimental de primates no humanos con Covid-19, los investigadores encontraron que las partículas de aerosol exhaladas varían mucho entre sujetos. Los que contaban con índices de masa corporal (IMC) más altos y un grado creciente de infección por Covid-19 tenían tres veces la cantidad de gotitas respiratorias exhaladas que otros voluntarios. 

Los investigadores encontraron que el 18 por ciento de los estos sujetos representaron el 80 por ciento de las partículas exhaladas de todo el grupo, lo que refleja una distribución de partículas de aerosol exhaladas que sigue la regla 20/80 observada en supercontagiadores de otras epidemias de enfermedades infecciosas. Eso significa que el 20 por ciento de las personas infectadas son responsables del 80 por ciento de las transmisiones.

Correlación entre el IMC y gravedad del Covid-19

El aumento en los aerosoles exhalados ocurrió incluso entre aquellos con casos asintomáticos de Covid-19, tal y como ha señalado Chad Roy, autor correspondiente y director de Aerobiología de Enfermedades Infecciosas en el Centro Nacional de Investigación de Primates de Tulane, según se recoge en un comunido de la enfermedad. 

"Hemos visto un aumento similar en las gotitas durante la etapa de infección aguda con otras enfermedades infecciosas como la tuberculosis", añadió. Por lo que "parece probable que las infecciones virales y bacterianas de las vías respiratorias puedan debilitar el moco de las vías respiratorias, lo que promueve el movimiento de partículas infecciosas en este entorno".

"La promiscuidad de los aerosoles en las vías respiratorias aumenta la probabilidad de que la infección se traslade de forma más profunda a los pulmones"

"La fuerte correlación observada aquí entre edad e IMC alto y una mayor propensión a generar gotitas respiratoria puede ser significativa a la luz del riesgo reconocido de aquellos con IMC alto, edad avanzada o ambos (ancianos, obesos y ancianos obesos) a desarrollar síntomas graves tras la infección por Covid-19", aseguran en el estudio. 

"La promiscuidad de los aerosoles en las vías respiratorias aumenta la probabilidad de que la infección de las vías respiratorias superiores se traslade de forma más profunda a los pulmones, promoviendo síntomas graves", explican los autores. Y así lo han visto con el SARS-CoV-2 en primates no humanos.

También aseguran que "aumenta la probabilidad de expulsar el aerosol al medio ambiente y la transmisión de la enfermedad, lo que subraya el riesgo de transmisión por las circunstancias de vida en las poblaciones de alto riesgo durante períodos prolongados de tiempo, como las residencias de ancianos". 

Eso sí, recuerdan que sus resultados sugieren que todas las personas, incluidas las que tienen un IMC bajo durante años, pueden tener riesgo de generar cantidad de gotitas respiratorias, particularmente después de una infección pulmonar, y por lo tanto abogan por la protección higiénica tanto de jóvenes como de ancianos cuando se trata de la reunión de personas en ambientes interiores, donde los aerosoles pueden permanecer y acumularse.