La sabiduría popular siempre ha sido amplia en lo que a dar consejos sobre los bebés y los niños pequeños se refiere. Cuestión de tradiciones o de creencias, con el paso de los años muchos de ellos han acabado siendo
desaconsejados por los pediatras, que directamente prefieren que no se lleven a cabo.
Es el caso del tradicional
modo de aplicación de los jarabes, que normalmente se ha hecho con cucharilla, algo que ahora se está intentando desterrar. El consejo ha sido compartido en Twitter por un enfermero que recuerda que cado 8 minutos un niño menor de 6 años ingiere medicina de manera incorrecta. Recomienda, en su lugar, utilizar siempre las jeringuillas o medidores facilitados dentro del propio medicamento.
Ocurre lo mismo con la dispensación del tradicional
anís estrellado para evitar los cólicos, algo que las asociaciones de Pediatría, tras los diferentes grupos de trabajo que se han formado al efecto, han decidido no indicar su utilización en niños por los casos de intoxicaciones detectadas.
En esta línea también está el clásico de
mojar el chupete en anís para conseguir que los bebés se duerman, una práctica que ya hace tiempo que se intentó desterrar por la ingesta de azúcar que conlleva o porque infusiones como el anís, el hinojo y el comino contienen un depresor neurológico que efectos adversos en grandes dosis, de manera que es difícil establecer el umbral para el organismo de un bebé.
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Un hilo rojo en la frente contra el hipo o anís estrellano frente a los cólicos, en la lista
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Poner siempre un
gorro al bebé para que no pierda el calor corporal está entre las creencias tradicionales más extendidas, y sin embargo en los últimos años a la madre se le pone en el pecho cuando acaba de nacer pero ya no se le pone con tanta celeridad un gorro, puesto que los estudios han demostrado que con el contacto piel con piel con la madre es suficiente para mantenerlo.
Para quitar el hipo las abuelas tienen por costumbre recomendar que
se pegue un hilo, a poder ser rojo, en la frente del bebé, un mito que aseguran que siempre funciona, aunque los pediatras matizan que el hipo siempre acaba remitiendo, de manera que la afirmación no tiene evidencia científica, y que no se puede achacar el fin del hipo con el efecto positivo del hilo.
También se suele abusar en el 'manual tradicional de abuelas' de las
colonias para perfumar a los bebés, pese a que los expertos aconsejan que no formen parte de la rutina de higiene del niño, puesto que la mayor parte de las colonias para bebés no son lo suficientemente delicadas para ellos.
Para cerrar esta recopilación de consejos desfasados cabe mencionar la creencia de que pasando un poco de
perejil o incluso una cerilla por el recto del bebé se evita el estreñimiento en los pequeños. Consejos todos ellos carentes de evidencia científica e incluso con posibles efectos adversos, según los pediatras.
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