Redacción. Madrid
“Seguimos sin conocer en muchos casos qué clase de virus y en qué estadio se encuentran los pacientes. Por lo tanto, tenemos aún problemas que resolver”. Así se ha expresado el ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, a propósito de los avances del Plan Estratégico Nacional para el Abordaje de la Hepatitis C.
Alonso ha ratificado que la cuestión inicial con la que se topó su departamento a la hora de confeccionar la iniciativa es que no se sabía “cuántos enfermos había”. El registro de los enfermos ha sido una de las principales tareas emprendidas por el equipo redactor de la estrategia, encabezado por Joan Rodés (“La persona que más sabe de la enfermedad en España”), y, a este respecto, ha señalado, en una entrevista en la Cadena Cope, que se está “trabajando duro” para solventar los flecos.
A este respecto, el ministro de Sanidad ha expresado que se consultará “esta semana” con las sociedades científicas, las comunidades autónomas y las asociaciones de pacientes. “Y paralelamente hemos avanzado en una negociación para garantizar que el Sistema Nacional de Salud (SNS) sea capaz de incorporar los tratamientos y que lleguen a todo el mundo que pueda asumir el sistema”, ha señalado Alonso. De igual forma, el máximo responsable del departamento sanitario del Gobierno de Mariano Rajoy ha indicado que a lo largo del pasado ejercicio se gastaron 149 millones de euros en tratamientos contra la hepatitis C.
En cuanto a la denuncia interpuesta por la Plataforma de Afectados por la Hepatitis C (Plafhc) contra él y la exministra Ana Mato, Alfonso Alonso ha lamentado que esta asociación haya optado por la “vía del ruido”. “No me han dado opción al diálogo. Pero más allá de lo que digan, lo entiendo todo, lo asumo todo, pero hay que trabajar por los enfermos y va a salir bien”, ha indicado.
Rechazo de la supuesta suspensión de tratamientos
Por otro lado, Alonso ha rechazado que las mutuas suspendan tratamientos en marcha para funcionarios: “He hablado con Administraciones Públicas y me ha prometido que se va a seguir con los tratamientos, han cambiado algunos hospitales y algunos médicos, pero deben mantenerse”. Finalmente, ha alabado el papel de Primaria y ha asegurado que “los retos de la sanidad pública” pasan “por reforzar la AP y comprender que el paciente en España ha cambiado con más enfermos crónicos”.