Los datos difundidos por el Ministerio de Empleo sobre las enfermedades profesionales registradas hasta agosto de 2016 hablan de una cifra notablemente menor a las obtenidas en años precedentes: en 2016 los
partes por enfermedad registrados ascienden a 14.165, el
mejor dato acumulado registrado desde 2007 y lejos de los 19.138 partes que se sellaron, por ejemplo, en 2015.
En concreto, las
actividades sanitarias registraron 838 partes comunicados entre enero y agosto, de los que 134 pertenecen a hombres y 704 a mujeres. La mayoría de ellos -592- conllevaron además una baja laboral.
Sanidad se convierte así en la
cuarta ocupación que más partes ha comunicado, por detrás del comercio al por menor -1.273 partes-, de la industria de la alimentación -1.054 partes- y de los servicios a edificios y actividades de jardinería -880 partes-.
El sector sanitario se recupera así ligeramente de las estadísticas anteriores, que la
situaban como la segunda actividad con más partes registrados entre enero y abril, periodo en el que selló 500 partes por enfermedad.
La mayoría de las enfermedades comunicadas por los profesionales de Sanidad y Servicios de Salud corresponden al apartado "
enfermedades infecciosas causadas por el trabajo de las personas que se ocupan de la prevención, asistencia médica y actividades en las que se ha probado un riesgo de infección", con 460 comunicaciones. Inmediatamente después aparecerían las "enfermedades provocadas por posturas forzadas y movimientos repetitivos en el trabajo", que habrían sido la causa de las enfermedades de 178 trabajadores.
Más mujeres que hombres
Distribuidos por sectores, los
profesionales de la salud han registrado 343 partes en total, de los que 231 conllevaron baja laboral y 274 pertenecieron a mujeres.
La cifra es algo menor para los
técnicos sanitarios y profesionales de terapias alternativas, que comunicaron 139 partes por enfermedad, 107 de ellos con baja laboral.
Por su parte los
trabajadores de los cuidados a las personas en servicios de salud sufrieron 331 enfermedades profesionales, 215 de las cuales necesitaron una baja laboral, y de los que 307 correspondieron a mujeres.
Por último, 32 de los partes por enfermedad correspondieron a
otros trabajadores de los cuidados a personas, con igual número de los que requirieron baja laboral y los que no.
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