Una nueva
ola de calor empieza esta semana en
España, provocando que en algunos territorios se lleguen a alcanzar temperaturas que rocen los
40 grados. Esta situación ha provocado que la Sociedad Española de Medicina Preventiva Salud Pública e Higiene (
Sempsph) mire a
Atención Primaria para que se fomente el papel de los sanitarios al domicilio de las
personas mayores y vulnerables. Además, la institución también considera necesario mantener un
contacto telefónico de forma periódica para conocer en todo momento el estado de la persona.
Inmaculada Salcedo, vicepresidenta de la Sempsph, considera en
Redacción Médica que desde que ha empezado el verano “se han ido tomando medidas para
contrarrestar las olas de calor. Se trata de un problema de salud pública en toda regla, por lo que es vital vigilar a las personas vulnerables en sus domicilios y trabajos”.
"Las olas de calor son un problema de salud pública en toda regla"
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Los golpes de calor son una de las consecuencias que la sociedad puede sufrir durante esta semana. Este factor es considerado por la especialista “un
evento centinela, una persona pueden morir por ello y se puede evitar perfectamente”. Debido a ello, Salcedo destaca el papel que debe desempeñar la Atención Primaria, “necesaria para acudir a los domicilios de las personas vulnerables que no disponen de una
buena climatización y ofrecerles alternativas.
El calor llega a descompensar todas las patologías de base que tenga el paciente afectado”.
Educación sanitaria frente al cambio climático y el calor
Seguir fomentando la toma de conciencia por parte de la población acerca de
cómo se puede combatir una ola de calor es otro de los caballos de batalla defendidos por la vicepresidenta: “Se debe seguir realizando educación sanitaria, muchas personas no se dan cuenta del
peligro que tiene el calor y acaban deshidratándose”. Para evitar esta situación Salcedo defiende generalizar una iniciativa que ya se ha instalado en múltiples municipios españoles, que es “destina
r centros para acoger a las personas que no disponen de climatización en casa, como pueden ser los centros cívicos. No se puede permitir que haya personas en la calle cuando la temperatura alcanza los 45 grados”.
Los actores que, según la especialista, deben aglutinar la educación sanitaria frente a las olas de calor han de ser “el
personal sanitario y los
medios de comunicación”. Por otra parte, Salcedo mira también a las
Consejerías de Salud, instituciones que “deben contar con planes específicos para tener en cuenta a los colectivos vulnerables”. Hasta la fecha la especialista cree que tanto las consejerías como el Ministerio de Sanidad están realizando “una buena labor” para tratar a las personas vulnerables, aunque advierte de que no se puede bajar la guardia.
"Muchas personas no se dan cuenta del peligro que tiene el calor y acaban deshidratándose"
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El
cambio climático ha ido agudizando el calor con el paso de los años, hecho que la vicepresidenta considera que “día a día
este cambio va calando más entre la sociedad, junto con las
precauciones que uno debe tomar. Es innegable que se están incrementando los valores de calor, antes solo estaban en julio y agosto, mientras que ahora en septiembre o octubre sigue estando presente.
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