Redacción. Madrid
Con un día de retraso sobre las previsiones del partido, el PSOE ha publicado el programa electoral definitivo con el que concurrirá a las elecciones generales del 20-D.
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Pedro Sánchez (en el centro) con los dos principales artífices del programa sanitario del PSOE: José Martínez Olmos (izquierda) y Rafael Bengoa (derecha).
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Se trata de un documento de 274 páginas de las que trece están dedicadas a la sanidad. En ellas, los socialistas plasman negro sobre blanco en forma de promesas las ideas que han venido defendiendo en los últimos meses. Dos destacan sobre todas ellas: van a promover una nueva Ley General de Sanidad y tratarán de alcanzar el 7 por ciento del PIB al final de la segunda legislatura.
Entre los objetivos fundamentales que destaca la formación están los de “asegurar una sanidad pública, universal, sostenible y de calidad”, que garantizarán a través de su reconocimiento como derecho fundamental en la Constitución, derogando el RD 16/2012 y promoviendo la citada nueva Ley General de Seguridad.
En este sentido, se comprometen a reforzar la coordinación y la codecisión de las CCAA en el marco del Consejo Interterritorial, reponer como partida presupuestaria el Fondo de Cohesión Sanitario.
Entre las iniciativas legislativas, aseguran que promoverán “un ambicioso Plan de modernización de la atención a la salud mental”, desarrollar a nivel estatal y en las CCAA de la Ley 33/2011 general de Salud Pública, como herramienta de cohesión territorial; y la creación de un Centro de control de enfermedades para dar apoyo a las políticas de salud pública.
En cuanto a la colaboración público-privada, desde el PSOE se deja claro que van a “mantener la titularidad pública de los hospitales y centros de salud y de los servicios sanitarios y clínicos que se prestan en los mismos, sin perjuicio de que el sector privado pueda desarrollar un rol complementario, sometido a criterios de complementariedad, transparencia, exigencias estrictas de garantías de calidad y control, así como una evaluación pública periódica dando prioridad a entidades privadas sin ánimo de lucro”.
Prometen asimismo “aplicar la estrategia de salud en todas las políticas públicas” colocando “la prevención y la promoción de la salud como prioridad de gobierno” ya que para los socialistas “los servicios actuales son insuficientes para prevenir ciertos problemas sociales” y en este punto se refiere a la dependencia y la cronificación.
Además, de acuerdo con las propuestas socialistas, el paciente jugará un papel activo en la gestión de su enfermedad educándolos en autocuidados y dejándoles acceder a su historia clínica.
Por otro lado, el PSOE propone acelerar la revolución digital y tecnológica en sanidad a través de la telemedicina por ejemplo, o con la monitorización a domicilio; y activar la responsabilidad con el medio ambiente en la sanidad y para ello proponen la reducción de emisiones contaminantes por parte de los centros sanitarios.
Se regulará la homeopatía
Uno de los puntos destaca incluir la salud como líneas transversales en todas las políticas. En este epígrafe se pretende la prevención de las desigualdades sociales en salud, el desarrollo de una Estrategia de Obesidad Infantil y la promoción del ejercicio físico. En este apartado destaca la propuesta de regular el sector de las terapias naturales, entre la que se encuentra la polémica homeopatía, para permitir “al ciudadano acudir a estos técnicos con las debidas garantías”.
El PSOE también propone “considerar la sanidad como una inversión y no como un gasto” y estimando que la reforma fiscal que promoverá el partido será la herramienta necesaria para dotar al sistema sanitario de una mayor financiación. Para ello propone una serie de medidas que fomenten la formación continuada y la retención del talento. También pretende potenciar la carrera investigadora de los profesionales en general y en especial de los especialistas internos. La inversión también irá destinada a potenciar el triple perfil (asistencial, docente e investigador) del profesional a través de partidas finalistas a las comunidades.
Prescripción enfermera
Sobre la polémica prescripción enfermera, el partido de Pedro Sánchez apuesta por una nueva regulación que apueste por “potenciar nuevos roles para los profesionales de enfermería en el sistema público de salud”, con especial atención a la cronicidad y a la gestión para “mejorar la eficiencia del sistema”.
En cuanto a la organización de la asistencia sanitaria, el PSOE quiere “situar a la persona en el centro”. Para ello, quiere garantizar la libertad de movimientos de pacientes en el SNS y que puedan recibir atención sanitaria en cualquier comunidad autónoma y crear un mecanismo de compensación de costes entre comunidades. Además, quiere establecer un Plan de Atención Integrada para crear estrategias de coordinación de los servicios sociales y sanitarios. En cuanto a la reproducción asistida, el PSOE quiere garantizar la igualdad “a todas las mujeres”. La “despatologización de la transexualidad” se propone como una medida para defender “el derecho a la identidad de género”.
La talidomida, también presente
En cuanto a patologías, el programa muestra la intención de reforzar el Plan Nacional sobre Cronicidad, crear un Registro de Cáncer, desarrollar una estrategia nacional de respuesta al VIH, las hepatitis víricas y las Infecciones de Transmisión Sexual, crear un sistema de detección, atención e investigación de las enfermedades raras, avanzar en la visibilización de la Esclerosis Laterl Amiotrófica, garantizar la detección precoz de los Trastornos del Espectro Autista, avanzar en investigación de enfermedades como la diabetes y el Alzheimer y crear un espacio de trabajo conjunto con los afectados por la Talidomida. El PSOE también se compromete a desarrollar una ley de muerte digna y de cuidados paliativos.
En cuanto al modelo, el PSOE defiende la creación de una tarjeta sanitaria común que permita el acceso a la historia sanitaria y la receta electrónica. En el programa se considera que “el SNS tiene una insuficiente financiación” por lo que, en el contexto de la reforma fiscal que propone, quiere asegurar la suficiente financiación, “procurando que la participación en el PIB alcance el 7% del PIB al final de la segunda legislatura”. Entre otras medidas se propone la creación de mecanismos de financiación vinculados a las listas de espera y mejorar la eficiencia en el gasto farmacéutico con un “sistema de selección pública para medicamentos y productos sanitarios sin patente”, es decir las subastas de medicamentos tal y como se practican en Andalucía.
El programa también hace hincapié en la mejora tecnológica de la sanidad y en facilitar “sistemas de apoyo a la decisión clínica de profesionales”. Otro de los puntos que llaman la atención es la inclusión de la Responsabilidad Social Sociosanitaria (RSS) en las propuestas del PSOE que engloban crear un Plan de Salud y Medio Ambiente que evalúe el impacto en salud de las actuaciones medioambientales. Entre las propuestas de RSS del PSOE se incluye la ampliación de la participación de farmacias en programas preventivos, crear una nueva regulación de enfermedades profesionales y aprobar un protocolo para situaciones de protección de los profesionales frente agresiones.
Derogar los copagos en dependencia
El principal partido de la oposición también hace un extenso hueco a las políticas en servicios sociales en su programa electoral del próximo 20 de diciembre. En concreto, el PSOE divide sus propuestas en cuatro importantes apartados: dependencia, servicios sociales, adicciones y Tercer Sector.
En el caso del primer punto, la iniciativa más llamativa que quiere impulsar Pedro Sánchez es la derogación del incremento del copago a los usuarios del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD), introducido durante esta legislatura.
En esta línea, si el PSOE gana las elecciones, promete establecer la garantía de gestión pública de la valoración de los grados de dependencia, sin perjuicio de que la privada pueda desarrollar actividades complementarias. En esta línea, el partido promete promover mecanismos de financiación adicionales en la atención a la dependencia que se vinculen a la reducción de las listas de espera, a la incorporación de los usuarios con Grado I, a la mejor calidad del servicio y a la creación de empleo.
Asimismo, incluye priorizar los servicios sobre las prestaciones económicas, lo que permitirá generar empleo estable y garantizar la calidad de la atención, así como incorporar “con carácter inmediato” al Régimen General de la Seguridad Social a los cuidadores familiares de los dependientes.
Blindar los servicios sociales en el Estado del Bienestar
En materia de servicios sociales, el PSOE se ha propuesto “blindar” el sistema público “como cuarto pilar del Estado del Bienestar”. Y lo hará aprobando una Ley marco de Servicios Sociales de ámbito estatal que fije los elementos básicos respecto a este campo, asegurando su sostenibilidad en el tiempo.
Otra de las normativas que derogaría el partido si llegara a la Moncloa es la recientemente aprobada ley 27/2013 de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local. Asimismo, revisará y reforzará el Catálogo de Servicios Sociales actual y el contenido del Plan Concertado de Prestaciones Básicas (con las autonomías, en el seno del Consejo Territorial) para adaptarlo a esta nueva ley marco.
Respecto a los profesionales sociosanitarios, el PSOE se ha propuesto mejorar la calidad de este empleo y la cobertura que se ofrece en los centros residenciales. Para ello, profundizará en la formación y especialización de estos trabajadores, a través de la acreditación periódica.
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