Ante el inicio del nuevo curso escolar en España, el
Ministerio de Sanidad ha publicado la
‘Guía de actuación ante la aparición de casos de Covid-19 en centros educativos’ para que, ante los diferentes escenarios que puedan darse, el ámbito educativo y sanitario puedan organizar “una pronta respuesta que permita controlar un posible brote”, según fija el documento.
El departamento de Salvador Illa reconoce que en los centros educativos
“pueden aparecer casos” debido a la movilidad y al contacto entre las personas, sin embargo, recuerda que “hay medidas que se pueden adoptar para reducir la probabilidad de transmisión”. A pesar de ello se contemplan varias situaciones.
La más grave es la de una
transmisión no controlada, la cual se considerará cuando haya un número mayor de lo esperado para el segmento etario en un territorio específico. En este caso,
el centro educativo se cerrará, inicialmente, durante 14 días.
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No obstante
, la duración de este periodo podría variar en función de la situación epidemiológica, de la aparición de nuevos casos que desarrollen síntomas y del nivel de transmisión que se detecte en el colegio o instituto. Además, previamente, se ordenará el
aislamiento domiciliario de los casos y se escalarán diferentes medidas de control, siendo el cierre de la escuela la última opción.
La reapertura del centro educativo se realizará cuando la situación esté controlada y no suponga un riesgo para la comunidad educativa.
Más escenarios posibles de brotes
El Ministerio de Sanidad maneja otros tres escenarios posibles, aunque menos graves que el de una transmisión no controlada. Así, el primer escenario que maneja Sanidad es el de un brote en un aula. En este caso, además del aislamiento domiciliario de los casos, medida que se contempla ante cualquier tipo de brote, se identificará y ordenará cuarentena a los miembros de los grupos de convivencia estrecha (CGE), también conocidos como ‘grupos burbuja’, y sus contactos estrechos.
Si los casos pertenecen a un GCE: suspensión de la actividad docente hasta transcurridos 14 días desde el inicio de la cuarentena de los contactos. Mientras, si los casos pertenecen a una clase que no está organizada como GCE Sanidad sugiere el mantenimiento de la actividad docente para los alumnos no clasificados como contactos estrechos.
El segundo escenario es el del brote en varias aulas sin vínculo epidemiológico, para los que se contemplan las mismas medidas que en el caso anterior, y el de brotes en varias aulas con vínculo epidemiológico, en donde, además, la actuación puede conllevar cierre de líneas completas, ciclos o etapa educativa.
Casos sospechosos y sintomáticas
Entre otros aspectos, el departamento de Salvador Illa define como caso sospechoso cualquier alumno o trabajador del centro con un cuadro clínico de infección respiratoria aguda de aparición súbita de cualquier gravedad que cursa, entre otros, con fiebre, tos o sensación de falta de aire. Otros síntomas como la odinofagia, anosmia, ageusia, dolores musculares, diarreas, dolor torácico o cefaleas, entre otros, pueden ser considerados también síntomas de sospecha de infección por SARS-CoV-2 según criterio clínico.
Asimismo, aquellas personas que tengan síntomas compatibles con Covid-19, sean parte del alumnado, profesorado u otro personal, así como aquellas personas que se encuentren en aislamiento por diagnóstico de coronavirus, no deben acudir al centro educativo. Tampoco acudirán aquellos que se encuentren en período de cuarentena domiciliaria por haber mantenido un contacto estrecho con alguna persona diagnosticada.
En caso de un de una persona que desarrolle síntomas compatibles, se le colocará una mascarilla quirúrgica y se le llevará a un espacio separado y habilitado al uso. La persona designada como responsable en el manejo de Covid-19 en el centro contactará con la familia o tutores legales. En caso de que la persona afectada sea trabajadora del centro se pondrá en contacto con su Servicio de Prevención de Riesgos Laborales.
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