Pasaporte Covid: "dudosa utilidad científica" y validez inferior a un año

La ministra de Turismo, Reyes Maroto, ha vuelto a mencionar el interés del Gobierno en elaborar un ‘pasaporte Covid’. Su objetivo es reforzar la seguridad de los viajes a escala europea cuando las condiciones sanitarias los permitan. Pero, ¿tienen valor a niven científico? Los epidemiólogos y preventivistas españoles creen que no, entre ellos Fernando Simón, el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, que este lunes 22 advirtió del impacto negativo que puede tener su creación. Además, recuerdan que, tal y como avanzan los planes de vacunación, no tendría mucho recorrido temporal. 

José Jonay Ojeda, portavoz de la Sociedad Española de Salud Pública (Sespas), asegura que en esta entidad les "suscitan algunos interrogantes" estos certificados de vacunación. "Desde un punto de vista científico, podríamos considerarlos como un documento de dudosa utilidad. Sin duda, podría facilitar la movilidad para las personas que lo posean porque ellas tendrían la tranquilidad de que no van a caer enfermas. Pero, a día de hoy, todavía se desconoce el grado de efectividad que tienen las vacunas a la hora de reducir la transmisión del virus, especialmente considerando la aparición de nuevas variantes", asegura. 

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Desde un punto de vista ético, el también socio de la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene (Sempsph) señala que estos pasaportes "pueden ser un factor de inequidad e injusticia social". "Tal vez pueda tener sentido cuando las vacunas estén universalmente disponibles y cualquier persona pueda acceder a ellas. En este caso, la posesión de estos certificados podría tener un especial sentido en la medida en que puede actuar como un incentivo para la vacunación. Permitir la movilidad podría estimular a las personas para que se vacunen en aras al interés social, a la salud de la población", afirma.

"Los países más pobres pueden encontrar en estos documentos un obstáculo para su libertad de movimientos"

"Pero, en España -prosigue-, tampoco tendría mucho sentido a día de hoy si lo que se pretende es favorecer la movilidad. Con buen criterio, la estrategia que se está adoptando para la vacunación ha considerado como grupo prioritario a las personas más vulnerables, a las personas que están institucionalizadas en las residencias y a las de mayor edad. Se trata, ante todo, de salvar vidas". José Jonay Ojeda considera que para este colectivo, es posible que no sea "de gran interés poseer esta certificación".

"En la actualidad no está garantizado el acceso universal a las vacunas. Todo lo contrario, como hay un reparto muy desigual, los países más pobres pueden encontrar en estos documentos un obstáculo para su libertad de movimientos si llegaran a exigirse como requisito para viajar. Estos documentos pueden convertirse en un importante factor de injusticia social e inequidad, de ahí algunas de las dudas que se plantean".

Depende de cómo avance la pandemia

Por su parte, José Luis Alfonso, jefe del Servicio de Preventiva en el Consorci Hospital General Universitari de València, considera que estos pasaportes tienen sentido cuando hay zonas endémicas. Pero el Covid afecta a prácticamente todo el mundo. 

"Se hace cuando conviene proteger a personas que viajan a países con patologías infecciosas. Pero en este caso va a depender mucho de cómo avanza la pandemia. El nivel y la necesidad de ese carnet puede desaparecer en un año, así que diría que no tiene sentido", afirma.

Alfonso es más partidario de realizar una PCR para evitar la transmisión que de utilizar este carnet. "Va a ser una dinámica demasiado rápida y difícil de asimilar en diferentes países. Habría que ver en qué idioma y con qué condiciones se hace. Pero considero que no corresponde porque es muy temporal, hasta que la mayoría de la población esté vacunada y se produzca inmunidad de rebaño", explica. Y, como José Jonay Ojeda, piensa que tiene un componente "estigmatizante". Así que, por el momento, ninguno avala la propuesta.