Que la sanidad está infradotada constituye un sentir mayoritario entre la población española. Es una impresión que, de hecho, comparten simpatizantes de partidos tan alejados como
PSOE y PP: según el último barómetro publicado por
El País y la
Ser, prácticamente dos de cada tres habitantes de comunidades gobernadas por estas formaciones consideran que se destinan “demasiados pocos recursos” al
Sistema Nacional de Salud (SNS), y una mayoría aceptaría pagar más impuestos si ello contribuye a “mejorar la sanidad pública”.
Tal y como refleja el
barómetro de enero, hasta el 64,5 por ciento de la población considera que la sanidad tiene “
demasiados pocos recursos” para su correcto funcionamiento. Por el contrario, dos de cada diez encuestados defiende que se destinan “los necesarios”, e incluso hay quienes afirman que hay “demasiados recursos” (un 3,8 por ciento).
Lo cierto es que esta percepción es semejante entre la ciudadanía española independientemente de su lugar de residencia. Según los resultados de esta encuesta, el 62 por ciento de los habitantes de
comunidades gobernadas por el PSOE considera que la sanidad está infradotada, tasa que se sitúa en el 63,8 por ciento en el caso de las regiones administradas por el
PP. En el caso de las autonomías gobernadas por
partidos regionalistas, este índice escala hasta el 69,8 por ciento.
También ‘une’ a simpatizantes de los dos partidos españoles más representativos la sensación de que es necesario mejorar la sanidad pública aunque ello requiera una carga económica mayor a través de
impuestos. En concreto, el 26,1 por ciento de los votantes socialistas lo haría sin contemplaciones frente al 16,1 por ciento de los populares.
Del 0 al 10, siendo el 0 la posición de que “es importante mejorar la sanidad pública aunque eso implique
pagar más impuestos” y el 10 la de que “es importante pagar menos impuestos aunque eso signifique reducir la calidad de la sanidad pública”, la media de los votantes del PSOE se sitúa en el 3,0, y la de los del PP en el 3,7.
Existen diferencias notables respecto a los votantes del resto de partidos. En el caso de los de
Unidas Podemos, la media se sitúa en el 1,7; en
Ciudadanos en el 3,7; y en
Vox en el 4,4.
Recentralización de la sanidad pública
Respecto a la
gestión de la sanidad en España, un 65,2 por ciento de los encuestados mantiene su apuesta por que sean los
gobiernos autonómicos quienes la sustenten, mientras que un 23,7 por ciento considera que esta cartera se debería regular de forma centralizada el Estado (otro 4,9 por ciento considera que esta competencia debería recaer sobre los ayuntamientos).
De hecho, hasta el 38,6 por ciento de los votantes del PSOE y el 41,4 por ciento de los del PP considera que el principal responsable del funcionamiento de la sanidad pública en las comunidades autónomas debería ser el
Gobierno de España. La tasa es del 44,2 por ciento en el caso de Ciudadanos y del 51,4 por ciento en el de Vox. Entre los simpatizantes de Unidas Podemos el índice cae hasta el 29,2 por ciento.
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