Muere Albino Navarro, histórico gestor de la sanidad española

Albino Navarro Izquierdo ha muerto este lunes, 9 de noviembre de 2020, en Madrid. Licenciado en Medicina por la Universidad Complutense, hizo su residencia en en la Fundación Jiménez Díaz, primero Medicina Interna y, después, Intensiva.

En sus comienzos profesionales ejerció la Medicina, aunque siempre le atrajeron los números. En una entrevista con La Revista de Redacción Médica, rememoraba que "cuando acabé 'Preu' (el curso preuniversitario) dudaba entre estudiar Exactas o Medicina, y me decanté por Medicina. Probablemente por eso he acabado en la gestión, porque los números y la parte de más ciencia y menos letras de la sanidad me han 'tirado' mucho.

Navarro recordaba así sus primeros pasos en la gestión. "Justo en ese momento en que había dificultades importantes en la Jiménez Díaz. A un grupo de, por aquel entonces, jóvenes se nos pidió que diésemos un paso adelante para gestionar la Fundación y ahí pasé de lo asistencial a la parte gestora. Fue una época muy curiosa y muy bonita, y en la que me enviaron el cese por motorista, como sucedía con Franco. Me cesó Julián García Vargas cuando era ministro de Sanidad; todavía guardo el sobre y nos reímos por ello de vez en cuando. El ministerio decidió hacerse cargo de la Fundación y cesó a todo el patronato", relataba a la periodista Sandra Melgarejo en 2014.

Y es que, en efecto, su carrera profesional ha estado marcada más por su faceta como gestor de la sanidad.

En el equipo en la Organización Nacional de Trasplantes

Sus primeros pasos en la gestión los dio de la mano de todo un referente en España, el nefrólogo Rafael Matesanz, histórico coordinador de la Organización Nacional de Trasplantes. "Me llamó nada más ser nombrado coordinador para formar parte del equipo de la ONT. Matesanz entendía que los intensivistas éramos parte esencial en el proceso de donación y trasplante porque estábamos presentes en dos partes muy importantes: en la obtención de órganos y en el seguimiento del trasplante. Entré como coordinador de trasplantes de la Comunidad de Madrid y fueron seis años espectaculares. Es muy gratificante haber participado en la aventura de la ONT desde el principio y haber contribuido a colocar a España a la cabeza del mundo en trasplantes".

Director del Insalud en Madrid

El cambio de signo político, en 1996, trajo a Albino Navarro un nuevo horizonte profesional. Con José María Aznar como inquilino de La Moncloa, el nuevo ministro de Sanidad José Manuel Romay Beccaría y Alberto Núñez Feijóo, nombrado al frente del Insalud, le llamaron para ofrecerle la posibilidad de ser el director del Insalud en Madrid. "Dado que había sido coordinador de trasplantes en la comunidad y ya tenía una trayectoria en la gestión, no cabía otra posibilidad que aceptar. Después de 14 años de Gobierno socialista, era una situación novedosa y Madrid era el 40 por ciento del volumen del Insalud antes de las últimas transferencias", contó a este diario.

"Fue una época muy dura porque lo primero que hizo el Gobierno nada más llegar fue un recorte de presupuestos, así que, tras incorporarme, a mitad de año ya tenía presupuesto cero, pero la verdad es que el Insalud funcionaba como un reloj y recuerdo esa etapa con mucho cariño. Estuve seis años, hasta el día de las transferencias".

Director de Relaciones Institucionales en Farmaindustria

Con la llegada de las transferencias Navarro abre un paréntesis en la gestión directa de los recursos sanitarios públicos, y afronta una etapa inédita para él hasta el momento, fichando por la patronal de la industria farmacéutica innovadora, Farmaindustria. Fue una etapa breve como director de Relaciones Institucionales, apenas dos años, que él relataba así: "La patronal fue consciente de que su número de interlocutores variaba y quería abrir una vía de relaciones institucionales y articular mecanismos de contacto con todas las comunidades autónomas. De la gestión directa pasé a organizar un sistema de organizaciones institucionales con las comunidades. Salí de Farmaindustria porque prefería cambiar de aires".

Fundación Investigación Biomédica Hospital Gregorio Marañón

Una llamada de Ignacio Martínez le hizo virar hacia la investigación, y como gestor tomó las riendas de la Fundación Investigación Biomédica Hospital Gregorio Marañón, "donde estuve también unos seis años. También fue una experiencia muy gratificante; el Gregorio Marañón pasó a liderar la investigación en Madrid, tanto en captación de fondos como en publicaciones científicas", resumió en entrevista con Redacción Médica. "Después, seguí gestionando investigación en el Centro de Investigación Biomédica en Red de Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición (Ciberobn). Era lo mismo, pero, en lugar de una estructura física de ladrillos como el hospital, se trataba de una red de veintitantos equipos de toda España".

Gerente del Servicio Extremeño de Salud

Rebasados los 65 años, Albino Navarro fue reclamado de nuevo a la primera línea de gestión sanitaria. Lo hizo José Antonio Monago al acceder a la presidencia de la Junta de Extremadura, para que liderara el Servicio Extremeño de Salud (SES). "Estaba muy tranquilo en el Ciber –porque gestionar investigación, desde el punto de vista de un gestor sanitario, da un cierto margen de tranquilidad: no hay listas de espera, no hay camas en los pasillos, ni episodios de legionela…– y José Antonio Monago me llamó cuando ganó las elecciones preguntándome si quería hacerme cargo del SES. Me pareció un reto profesional excelente y fueron dos años que viví con mucha alegría… en lo laboral. En lo personal, la distancia con la familia pesaba mucho", explicaba Navarro. Esos motivos personales le hicieron presentar su dimisión a finales de 2012. 

Su última aventura profesional fue en la empresa privada, en Eulen, como director del área de Madrid.

En marzo de 2017 decidió disfrutar al fin de su merececida jubilación.

Albino Navarro deja el recuerdo de su profesionalidad y multitud de amigos en el sector sanitario.