Los países OCDE acuerdan una evaluación sanitaria con reportes del paciente

La Reunión Ministerial de Salud de la OCDE, celebrada este martes en París, ha dejado una serie de acuerdos y compromisos por parte de todos los países miembros de este organismo. Como han ido avanzando durante las semanas previas a este encuentro, el fortalecimiento de los sistemas de salud es uno de los objetivos primordiales para todos los asistentes. Junto a este asunto, destaca la necesidad de hacer que los sistemas se centren en las personas, evaluando y comparando de manera internacional los resultados obtenidos en los distintos sistemas sanitarios. La salud mental ocupa también uno de los principales puntos a tratar a nivel nacional y el debate sobre la mejora de los sistemas de salud digitales ha llegado para quedarse.

La salud ya se ha presentado como la clave para lograr la resiliencia económica en múltiples ocasiones para Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). Con el fin de conseguir este objetivo, los países presentes en la Reunión del Comité de Salud a nivel ministerial, se comprometen a “fortalecer y mejorar” el acceso a los sistemas sanitarios, en particular a la Atención Primaria, la atención al final de la vida, la salud mental y los servicios digitales, tal y como señala este organismo en un comunicado. 

Cómo ya señaló a este medio el presidente de esta reunión, Frank Vandenbroucke, abordar la escasez de profesional sanitario también se presenta como una de las prioridades de este encuentro. Para ello, pretenden “formar, retener y mejorar las condiciones laborales de los trabajadores sanitarios y asistenciales e introducir nuevos enfoques laborales, como el reparto y la transferencia de tareas”, con la intención de promover la seguridad de los pacientes. Junto a esto, combatir la resistencia a los antimicrobianos se presenta como una urgencia para la OCDE, que pretende adoptar medidas de prevención y control de infecciones. 

Atención sanitaria centrada en las personas

Hacer que los sistemas de salud “estén más centrados en las personas” se plantea como una necesidad urgente en esta reunión. Con este objetivo, los ministros de los países miembros se han comprometido a “evaluar, de manera comparable, los resultados y experiencias clínicos y reportados por los pacientes en los países, incluso midiendo, a intervalos regulares, los indicadores reportados por los pacientes y ampliando el alcance de PaRIS a más países que deseen unirse”.

También se pretende llevar a cabo una serie de innovaciones en los sistemas de salud “que promuevan la salud física y mental de las personas”, incluso mediante la “evaluación de la capacidad y la rentabilidad” de los propios sistemas. Para ello, el Comité de Salud pide a la OCDE que apoyen a los países “en su esfuerzo por evaluar de manera internacionalmente comparable” los resultados clínicos y que ayuden a “aprovechar el potencial transformador de las nuevas tecnologías para la salud, como la genómica, la genética y la inteligencia artificial.

Mejor salud mental y poblaciones más saludables

En el comunicado publicado tras la Reunión Ministerial, la Comisión de Salud de la OCDE recuerda que “las enfermedades no transmisibles causan alrededor del 90 por ciento de las muertes en los miembros de la OCDE y también son una causa clave de discapacidad” y que existen “grandes desigualdades” entre el estado de salud y la esperanza de vida entre grupos de población.

Para paliar esta situación, los países que asistieron a este encuentro se comprometen a mejorar los resultados de salud mental, “incluida la atención de la salud mental comunitaria, la prevención y la integración de las necesidades de salud mental en la salud pública y la Atención Primaria”, con el objetivo de reducir las necesidades insatisfechas de los pacientes en los sistemas de salud.

Además, señalan que van a “revitalizar” los compromisos que pretenden situar la promoción de la salud y la prevención de enfermedades en el centro de los sistemas sanitarios. Esto incluye, según especifican, “el tratamiento de los determinantes sociales, económicos, ambientales y de otro tipo de la mala salud y la promoción de políticas de salud, con especial énfasis en los factores del estilo de vida en para reducir los niveles de obesidad, de consumo de alcohol, la exposición a la contaminación y avanzar hacia sociedades libres de tabaco y nicotina”.

En este sentido, la Comisión de Salud llama a la OCDE a desarrollar “una iniciativa gubernamental coordinada” para mitigar los riesgos de la digitalización u las plataformas de redes sociales para la salud mental, en particular de niños y jóvenes. También reclaman que se ayude a los países a abordar las desigualdades de género y que se trabaje en un programa que avance hacia sociedades libres de tabaco y nicotina.

La inteligencia de los sistemas de salud

Por otra parte, el uso cada vez mayor de los servicios de salud digitales por parte de los pacientes trae consigo la necesidad de obtener los avances tecnológicos que permitan que los sistemas de salud sean más resilientes. Además, la introducción de la Inteligencia Artificial (IA) en los sistemas sanitarios reclama también una mejora en la confianza tanto en la gestión de emergencias sanitarias como en la prestación de servicios que utilicen esta tecnología.

Para ello, los países miembros acuerdan fortalecer la confianza en el uso, tanto de la IA, como de las nuevas tecnologías digitales, y mejorar la gobernanza de los datos sanitarios a nivel mundial “mediante el fortalecimiento de la difusión y adopción, en particular en otros foros internacionales, de la recomendación de la OCDE sobre la gobernanza de los datos sanitarios; así como mejorar la alfabetización sanitaria”.

Además, acuerdan que la IA se utilizará en los sistemas de salud “de forma responsable, centrada en las personas y sensible a las preocupaciones éticas”. Además, los países se van a encargar de identificar aquellas áreas donde puede ser necesaria una regulación específica de la salud.

En este contexto, el Comité de Salud pide a la OCDE evaluaciones y recomendaciones de políticas sobre el uso de la IA en la salud, “desarrollar un marco sectorial específico para la IA en la salud, que esté alineado con los marcos multisectoriales existentes” y emprender más trabajas en materia de salud para mejorar los datos, los mercados farmaceutas y fortalecer la seguridad del paciente.