El Senado ha aprobado por una holgada mayoría el proyecto de la
Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU) que ha diseñado el ministro
Joan Subirats. La votación supone el penúltimo paso para que la norma vea finalmente la luz, ya que se han incorporado al texto tres nuevas enmiendas transaccionales que obligarán a votar de nuevo su contenido en el
Congreso de los Diputados. Entre esas modificaciones, se encuentra el establecimiento de un
periodo transitorio que retrasará la aplicación de los
nuevos criterios para acceder a una plaza de docente de Medicina hasta el año 2024.
La votación en el pleno se ha saldado con un resultado de
140 votos a favor, 107 en contra y 7 abstenciones. El Gobierno de coalición ha contado con el apoyo de algunos de sus socios habituales de la investidura como
Esquerra Republicana (ERC), el
Partido Nacionalista Vasco (PNV) o
EH Bildu, mientras que Junts se ha decantado finalmente por la abstención. Los únicos rechazos han sido protagonizados por los senadores del
Partido Popular y Vox.
El trámite parlamentario ha permitido la modificación de tres aspectos con respecto a la anterior versión de la ley. Además de mantener la normativa vigente en los concursos de cobertura de plazas de personal docente e investigador hasta el 31 de diciembre de 2023, también se ha dado de margen a las universidades hasta el próximo curso para adaptar el
régimen de dedicación de sus profesores y se ha modificado la denominación de
los colaboradores indefinidos.
Este nuevo giro en la tramitación provocará que las nuevas condiciones para los aspirantes a una plaza de profesor de Medicina o de Enfermería en la universidad se prolonguen hasta el próximo ejercicio. Entre los grandes cambios, el anteproyecto garantizaba un mayor
reconocimiento de la experiencia asistencial para acceder a la docencia a través de las comisiones valuadoras.
La transición en la Ley de Universidades
El ministro de Universidades,
Joan Subirats, ha aprovechado su intervención en la Cámara Alta para validar este periodo extra negociado con los grupos. “
Los cambios van a permitir reforzar las lógicas de transición que se necesitan en un proyecto de ley de esta envergadura, acompasando esta transición a los ritmos de financiación”, ha apostillado.
En la misma línea se ha posicionado el diputado socialista
Josep María Reniu, autor de esta transaccional que ha negociado previamente con
Esquerra Republicana. “Teníamos que establecer un régimen transitorio para la incorporación de personal docente investigador para que pueda regirse por la normativa actual”, ha agregado en su turno de defensa de las enmiendas que ha calificado como “importantísimas”.
La decisión de perfeccionar el texto ha provocado que la tramitación de la ley, que se ha realizado por el
proceso de urgencia, se demore un poco más hasta su votación definitiva en el Congreso en segunda vuelta. Algo que, por ejemplo, afectará al colectivo de psicólogos migrantes que están pendientes de este cambio legislativo que mejorará su capacidad para
homologar los títulos del extranjero y acceder al Máster General de Psicología.
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