Redacción. Madrid
Los médicos de la sanidad pública han conquistado el cariño de los españoles. El 91 por ciento de los ciudadanos consideran que son los profesionales que, actualmente, mejor están cumpliendo con sus funciones. Sólo un siete por ciento de la encuesta realizada por El País desaprueba su desempeño, lo que genera un saldo de aceptación de 84 puntos. Con estos resultados, los sanitarios encabezan el listado y se posicionan por encima de reconocidas figuras públicas, como el Rey Felipe VI (57 puntos), o de instituciones como la policía (67), la universidad (51) o los ayuntamientos (2).
Los investigadores científicos siguen de cerca a los médicos de la sanidad pública y han alcanzado una aceptación del 83 puntos (89 por ciento a favor y seis por ciento en contra). Unas cifras que les permiten estar muy por encima de otros profesionales como los abogados (39 puntos), los jueces (14 puntos) y los fiscales (13 puntos).
A pesar del amplio reconocimiento a los médicos y los investigadores científicos, la sanidad pública no cuenta con la misma suerte. Según los resultados, el 53 por ciento de los ciudadanos aplaude el desempeño del sector sanitario, mientras que el 44 por ciento lo desaprueba. En este sentido, la aceptación general se reduce a nueve puntos. Aunque sanidad se mantiene en positivos, está en la parte baja de la tabla, junto con el Tribunal Constitucional (ocho puntos) y los ayuntamientos (dos puntos).
Los peores valorados son los políticos. En total, el 79 por ciento de los ciudadanos están en contra de su labor, frente a un 17 por ciento que lo defiende, dando por resultado 62 puntos negativos. Le siguen las instituciones bancarias con 58 puntos negativos (78 por ciento en contra y 20 por ciento a favor), y en el tercer lugar los partidos políticos con 54 puntos negativos (75 por ciento en contra y 21 a favor). Otros que no han logrado alcanzar una ponderación positiva han sido la patronal (-33 puntos), los sindicatos (-31), el Parlamento (-20) y las comunidades autónomas (-15).
Los resultados demuestran un menor descontento por parte de los ciudadanos hacia las instituciones. En este sentido, el Barómetro de Confianza Ciudadana en las Instituciones ha pasado de tener 20 de 34 organizaciones en negativo durante 2012 a 12 tres años después. Un cambio que está siendo liderado por los profesionales del sector sanitario.
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