Las profesiones sanitarias no son fácilmente sustiuibles por
máquinas. Así se desprende de un estudio realizado por la Universidad de Oxford, que
bajo el título The Future of Employment: How susceptible are jobs to computerisation ha analizado 702 ocupaciones según su propensión a
robotizarse o no.
Los autores del estudio exponen que en lo que a salud se refiere, las tareas de diagnóstico ya están siendo informatizadas, y pone como ejemplo el trabajo de los oncólogos del
Memorial Sloan-Kettering Cancer Center, donde se
usa el ordenador para proporcionar diagnósticos de tratamiento. Para ello, valoran 600.000 informes de pruebas médicas, 1,5 millones de registros de pacientes y ensayos clínicos y 2 millones de páginas de texto de revistas médicas, que son utilizadas para el
benchmarking, que permite reconocer patrones. De este modo, el ordenador compara los síntomas individuales de cada paciente, la
genética y el historial de medicación para diagnosticar y desarrollar un plan de tratamiento con "la mayor probabilidad de éxito".
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Emergencias, salud mental, otorrinos y ortoprotésicos, lejos de los niveles altos de robotización
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Pese a que el
uso de la tecnología está haciendo avanzar muchas facetas del cuidado de la salud, el estudio organiza en un ranking las
702 profesiones analizadas de
menos a más probabilidad de robotizarse, otorgando además un "1" adicional a aquellas que son sustituibles por máquinas y un "0" a las que de ningún modo podrán serlo.
Médicos y enfermeros, insustituibles
En esta lista que va de las menos sustituibles a las más propensas, habría que bajar del puesto 702 al 651 para encontrar la primera sanitaria, que serían los
técnicos de laboratorio dental, seguida en la 656 por los técnicos de laboratorio oftalmológicos. Los técnicos de Farmacia aparecen en el puesto 562, y los técnicos de laboratorio médico y clínico se sitúan en la 533. Los de registros médicos e información de la salud aparecen en la 550 y los asistentes veterinarios y cuidadores de animales de laboratorio lo hacen en la 495.
Sin embargo, el grueso
de las profesiones sanitarias aparecen en las primeras posiciones, las más alejadas de su posible robotización, y muchas de ellas calificadas además con ese "0" que las tilda de insustiuibles, como médicos y cirujanos, dentistas y enfermeros titulados.
En concreto, con
bajas tasas de robotización aparecen los directores de la gestión de emergencias, trabajadores sociales de salud mental y abuso de sustancias, otorrinos, ortoprotésicos, trabajadores sociales de la salud o cirujanos orales y maxilofaciales.
También están entre los menos "computerizables" los psicólogos, nutricionistas, científicos médicos, podólogos, consejeros de salud mental, o directores médicos y de salud.
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