Las diez demandas de Primaria para 2015

Pretende conseguir en primer lugar aquellas medidas que no supongan un gasto económico y que se puedan alcanzar con voluntad política y cambios legislativos

Jueves, 09 de abril de 2015, a las 17:27
Redacción. Madrid
Las organizaciones de médicos de Atención Primaria de Castilla-La Mancha, Aragón, Galicia, País Vasco, Cantabria y Andalucía han dado el pistoletazo de salida a la celebración el próximo lunes del día dedicado a este ámbito. Los colegios de médicos, las sociedades científicas y sindicatos médicos han elaborado un decálogo de reivindicaciones  para que los profesionales puedan realizar su trabajo de forma satisfactoria y eficiente.

Así, piden que la Atención Primaria es el eje del sistema sanitario, con el consiguiente  reconocimiento a todos los efectos: incremento presupuestario, dotación adecuada de recursos humanos o aumento de la capacidad de realización de pruebas diagnósticas.

Entre las demandas principales exigen que AP lidere, por tanto, es necesario otorgarle más peso en la gestión de los procesos del enfermo crónico dentro del sistema sanitario y social, incluyendo la coordinación con el nivel hospitalario, centros geriátricos y de discapacitados y asociaciones de pacientes. Además, el objetivo es que los médicos de familia y pediatras tengan más relevancia en la toma de decisiones relacionadas con la organización y gestión de los recursos sanitarios.

Dado su papel central en el sistema sanitario, los médicos de familia y pediatras consideran que deben tener acceso al catálogo completo de pruebas complementarias según indicación razonada y criterios de eficiencia clínica. El ejercicio de la Medicina en Atención Primaria debe tener un entorno profesional y laboral atractivo: estabilidad, incentivación basada en criterios profesionales, reconocimiento de la penosidad. Otra de las intenciones es que las agendas se adecúen a una asistencia de calidad, con un tiempo mínimo de 10 minutos por paciente, siempre teniendo en cuenta el contexto socio demográfico y eliminando toda actividad burocrática que no tenga justificación clínica, facilitando al máximo su realización.

La gestión de la Incapacidad Temporal  debe tener un diseño basado en criterios clínicos, evitando la multiplicación de informes que requiere la nueva regulación, y haciéndola extensiva a todos los niveles asistenciales. Los profesionales pretenden que la receta electrónica se extienda a todos los niveles asistenciales y a todo  el Sistema Nacional de Salud, en un formato ágil y  que garantice la interoperabilidad, así como el acceso al historial médico integrado a nivel nacional.

Otra reivindicación histórica es que la formación en Atención Primaria empiece en la universidad, con la creación de un área de competencias en Medicina de Familia y la definición de competencias específicas de Pediatría de AP en la formación de pregrado, adecuando los criterios de acceso a la docencia universitaria a la realidad de la Atención Primaria. Por último quiere que se facilite el acceso de los profesionales de AP a las actividades formativas y promover la investigación teniendo en cuenta las características propias de dicho nivel asistencial.