El
gasto sanitario mantiene la tendencia al alza en España, donde en 2019 se invirtieron más de
115.000 millones de euros en el sector de la salud. Un impulso al que contribuyeron tanto las
administraciones públicas como los
fondos privados, que incrementaron sus partidas, respectivamente, hasta los 81.590 y los 33.868 millones de euros.
Estos son algunos de los datos que refleja el
último informe anual del Sistema Nacional de Salud, que indica que las administraciones se atribuyen el
70,7 por ciento del gasto sanitario total en España. La suma de
81.590 millones de euros registrada en el ejercicio 2019 (4.186 millones más que en el año anterior) apuntala la tendencia alcista de la inversión pública en salud iniciada en 2013, cuando el montante fue de 66.474 millones.
Las
administraciones regionales, con una participación del 92,3 por ciento (75.312 millones de euros) se mantienen como la principal fuente de recursos de la financiación sanitaria pública. Por su parte, las administraciones de la seguridad social (mutuas colaboradoras de la Seguridad Social y las mutualidades de funcionarios) contribuyeron al 5,7 por ciento de la partida. El menor peso recayó sobre los ayuntamientos (0,9 por ciento).
También ha sido favorable la evolución del gasto sanitario con
fondos privados, que en 2019 alcanzó una suma de
33.868 millones de euros frente a los 32.637 de 2018. Desde el año 2015, la partida se ha incrementado en 5.283 millones.
Gasto sanitario en España en función del PIB
De acuerdo con los datos del
Sistema de Cuentas de Salud (SCS), el gasto total del sistema sanitario español alcanzó de esta forma los 115.458 millones de euros. Durante el
quinquenio 2015-2019, dicha partida se incrementó un 15,8 por ciento (15.748 millones) impulsada especialmente por el sector privado con un aumento del 18,5 por ciento (5.283 millones).
Respecto al impacto del gasto sanitario en la economía española, en 2019 esta partida representaba un
9,3 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB). Un 6,6 por ciento está financiado con recursos públicos y un 2,7 por ciento con recursos privados.
En relación a la población, el gasto sanitario total ha pasado de
2.148 euros por habitante en el año 2015 a 2.451 euros por habitante en 2019, lo que supone un incremento anual medio del 3,3 por ciento durante este plazo de tiempo.
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