La dismenorrea o dolor menstrual es una afección que
sufren entre un 50 y un 90 por ciento de las personas con útero y que implica una serie de síntomas como dolor de cabeza, diarrea o dolor intenso que pueden alcanzar niveles incapacitantes en el 10 por ciento de los casos.
Actualmente los únicos remedios que se utilizan son aquellos enfocados a reducir la dilatación del miometrio, el músculo uterino y, por lo tanto, el dolor que provoca al inflamarse. Para ello,
se acude a los anticonceptivos o analgésicos y se recomienda que se acuda al ginecólogo para que investigue si es un síntoma de otra patología como la endometriosis.
Sin embargo, algunos estudios actuales han tratado de encontrar una
solución no farmacológica que pueda ser efectiva por si misma o como complemento, para lo cual se ha analizado el efecto de la suplementación con magnesio.
El magnesio, clave para reducir el dolor de útero
La investigación '
Effectiveness of Magnesium on Menstrual Symptoms Among Dysmenorrheal College Students: A Randomized Controlled Trial' (
Eficacia del magnesio en los síntomas menstruales entre estudiantes universitarias con dismenorrea), publicada por el International Journal of Women’s Health and Reproduction Sciences, ha demostrado que el uso de este compuesto mejora los síntomas menstruales y reduce su intensidad.
En este trabajo dividió su cohorte en tres grupos a los cuales administró placebo y magnesio en dosis de 150 y 300 miligramos diario de manera aleatoria. Posteriormente, las voluntarias, que
padecían un dolor menstrual de 5 a 9 sobre una escala de 10, tenían que reflejar en un diario la intensidad del mismo en sus siguientes ciclos.
Los resultados demostraron que
la eficacia de magnesio 300 miligramos era la mayor de todas, habiendo también una mejora sustancial en las personas que tomaron magnesio 150 miligramos sobre aquellas que solo tenían placebo.
La dosis recomendada de magnesio serían 300 miligramos diarios
Por tanto, se establece que la dosis recomendada en mujeres que padezcan una
dismenorrea fuerte sería de 300 miligramos de un suplemento de magnesio, el cual
puede consumirse de manera segura ya que los cuerpos sanos tienen la capacidad de eliminarlo.
Aun así, es necesario que
algunos grupos poblacionales tengan especial precaución, como son las embarazadas o mujeres en periodo de lactancia, las que padecen bloqueo cardiaco, problemas renales, así como aquellas que estén medicándose con algunos antibióticos, por lo que sería necesario consultarlo previamente con un médico.
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